Frei Betto
Terminado el apocalipsis, juzgados los vivos y los muertos en la gran asamblea universal del Valle de Jericó, Matusalén y Noé, encargados de revisar el rescoldo final, encontraron entre los escombros de Brasilia, desparramados entre las ruinas de los ministerios, los archivos ultrasecretos de la República.
–Fíjese, Noé, éstos llevan el título de ?sigilo eterno?.
–¿Eterno? Esa gente no le puso mente a lo que dijo Jesús, que todo lo que se haga en secreto sería proclamado desde los tejados. ¿De qué se avergonzaban las autoridades brasileñas?, preguntó el anciano del arca.
–Veamos pues esos papeles. Tratan de la guerra del Paraguay. Aquí está el informe de la actuación del comandante Luis Alves de Lima e Silva, el Duque de Caxias… ¡Virgen santa, Noé…! ¡Qué crueles fueron los soldados brasileños con los paraguayos!
–¿Soldados, Matusalén? Lea esto: esclavos reclutados con la promesa de una libertad que nunca les dieron. La mayoría tuvo la muerte como premio del combate.
–¡Virgen santa, Noé, y el barón de Rio Branco! ¡Cómo logró ampliar así, a cara de perro, las fronteras del Brasil!
–Por eso, Matu, hubo quien, en el palacio de Itamaraty, prefirió que los documentos quedasen a la sombra de las barbas del barón. La historia se hace entre heroísmos y bajezas. Sólo que siempre fue escrita por los vencedores, nunca por las víctimas. Eso de ?sigilo eterno? fue para para tapar las infamias habidas por debajo de la mesa.
–Mire aquí, Noé, los archivos de la dictadura militar. Fíjese en este mapa: señala cuándo, quién, cómo y dónde fueron apresadas, torturadas y asesinadas las víctimas cuyos cuerpos nunca fueron localizados y llorados por sus familias. E incluso constan los nombres de los militares que participaron en las torturas, asesinatos y secuestros.
–Matu, ¡y este otro documento, qué vergüenza!
–¿Vergüenza por qué?
–Son los ?decretos secretos? de la dictadura. Como documento público ¿puede ser secreto? Eso sería parecido a que alguien se presentara como un ladrón honesto…
–Sí, Matu, son vergonzosos esos papeles que tratan de los gobiernos de Sarney y Collor.
–¿Qué hay de interesante en ellos?
–¡Son datos estremecedores! ¡Cuánta basura en tantos gobiernos del Brasil! Sea en forma de tráfico de influencias, corrupción, nepotismo y favores ilícitos. Ahora comprendo por qué las autoridades brasileñas encubrieron a los historiadores tantos períodos y hechos de la historia del Brasil.
–En aquella bolsa -dice Noé- están las licitaciones secretas de la Copa del 2014 y de las Olimpiadas del 2016 en el Brasil. ¡Cuánta porquería! Obras cuyo coste fue multiplicado por millones.
–Es lástima que se acabó el mundo, la historia terminó y toda esa gente se convirtió en polvo. ¡Qué importante hubiera sido que el pueblo brasileño tuviera derecho a la trasparencia histórica! Con seguridad se hubiera evitado que la nación repitiese tantos errores y reeligiese a aquellos que distorsionaron los hechos y los encubrieron para perpetuar una imagen que nunca merecieron. (Traducción de J.L.Burguet)
Frei Betto es escritor y asesor de movimientos sociales, autor de «Diario de Fernando. En las cárceles de la dictadura militar brasileña», entre otros libros. http://www.freibetto.org/> twitter:@freibetto.
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2011-07-09 06:05:23
