¡Cierto! Los expedicionarios del 14 de junio de 1959, «Llegaron llenos de patriotismo, enamorados de un puro ideal y con su sangre noble encendieron la llama augusta de la libertad». La gesta de junio de 1959, constituyó un despertar. Una derrota militar marcó la vía para la lucha que no se detendría hasta terminar con la dictadura de Trujillo.
Los héroes de junio de 1959 vinieron con el objetivo de derrocar por todos los medios a su alcance el régimen de opresión y sangre establecido en 1930 en la República Dominicana por Rafael Leónidas Trujillo Molina.
Su fin era instalar un gobierno provisional democrático revolucionario que en un período de dos años pusiera en marcha el programa de «la Revolución» y creara las condiciones para que el pueblo dominicano pudiera ejercer libremente sus derechos políticos y sociales. Y derogar toda la legislación antidemocrática de la tiranía. A 52 años de la efeméride, aún la agenda no se ha completado, pero a pesar de los obstáculos colocados por los que se resisten al imperio de las instituciones democráticas, nadie ha podido detener la marcha del pueblo dominicano por el estado de derecho. En 1963, cuando derrocaron el primer gobierno democrático post Trujillo, el del presidente Juan Bosch, la respuesta fue la resistencia contra los que interrumpieron el régimen constitucional. La sangre de Manolo Tavarez, Hipólito Rodríguez y todos sus compañeros, desnudó a los que se expresaban con una retórica democrática que sepultaron sus actos.
La guerra de abril de 1965 los expuso de cuerpo entero ante el país y el resto del mundo. De los 193 expedicionarios de junio de 1959, sobrevivieron los dominicanos Poncio Pou Saleta, Mayovanex Vargas, Gonzalo Almonte Pacheco y Francisco Medardo Germán, así como los cubanos Delio Gómez Ochoa y Pablito Mirabal. Casi todos fueron fusilados por disposición del jefe del Estado Mayor Conjunto, Rafael Leónidas (Ramfis) Trujillo Martínez.
La colectividad nacional debe recordar la gesta de junio de 1959 con respeto y expresar gratitud permanente a los que ofrendaron sus vidas en una manifestación de reconocimiento a los que viven para contar la historia y servir de ejemplo de entrega y valor: Mayovanex Vargas y Delio Gómez Ochoa. Honremos a los hombres del 14 de junio de 1959. ¡Cierto! «…con su sangre noble encendieron la llama augusta de la libertad».
2011-06-26 21:15:54
