Alfredo Freites
La reciente condena a cinco años de cárcel a la diputada Rosa Amalia Pilarte resuma la suma de valores negativo de nuestra sociedad que además de lanzar la mujer al trabajo para sostener familias también la degrada con su participación en el oscuro mundo de las drogas.
La diputada del PRM es la tercera persona de ese partido cuya participación política en las elecciones del 2020 tiene probados vínculos con el narco tráfico. La señora Pilarte simboliza una de las variantes de la penetración del dinero sucio en la lucha por el poder y pone en evidencia hacia dónde se encamina el país.
Estamos a un tris de ver que las luchas entre partidos sean confrontaciones de pandillas de narcos por puntos de drogas. La indiferencia o complicidad de políticos y comunicadores con el dinero fácil allanan la acelerada descomposición social del país.
Es Rosa Pilarte la flor pestilente del jardín político. Ella me apena y me avergüenza.
La diputada de La Vega, celebrada anfitriona en las lides políticas cibaeñas, es la madre y esposa de una familia estigmatizada por la justicia, pero no la única vinculada a los negocios ilegales que buscan cualquier vía de penetración y crecimiento.
El poder político es hacia donde crece ese cáncer. Los narcotraficantes solo tienen dinero, pero el poder puede darles la más alta protección y facilidad de crecimiento. La obtención de un cargo legislativo les confiere inmunidad, poder, prestigio y vínculos con sectores empresariales, por eso, en busca de una candidatura invierten los millones que sean que necesarios y patrocinan las ambiciones políticas de cómplices como ocurrió en Santiago para las elecciones del 2020.
También el narco dinero penetra la justicia para obtener impunidad o pequeñas penas de prisión, por eso vemos que negociar ilegalmente con miles de millones de pesos tiene la misma condena que el robo callejero de un teléfono móvil.
Rosa Amalia Pilarte financió su actividad política y la de sus allegados en el PRM con narcodinero; con esos recursos pagó su campaña interna en el PRM y también uso los dos helicópteros de la familia para que sus compañeros de partido hicieran campaña electoral.
La condena de la señora Pilarte por lavado de activos del narcotráfico podría tener vínculos con otros de ese mismo partido como los casos el narco diputado del PRM, Miguel Gutiérrez y el ex funcionario municipal, Yamil Abreu, ambos condenados en EEUU. Estos vínculos permiten especular que podría haber solicitud de extradición en los días venideros.
Al condenar a la señora Pilarte la justicia da indicios de que el esposo e hijos de la dama, que también han sido imputados, podrían ser sancionados, pero persiste la duda de si hay una investigación para conocer los posibles narcotraficantes con los que ellos hacían negocios y si hay otros políticos involucrados en la red delictiva.
Como hay probados vínculos de Rosa Pilarte con la política dominicana ella es una alarma de que podría haber más dinero del narcotráfico con cargos legislativos y municipales en el PRM, partido que no se auto critica por tener aún a esos personajes como miembros.
También, las condenas del expresidente de Honduras, Hernández y de Trump son advertencia de que el poder judicial norteamericano no respeta las pasadas jerarquías cuando de violaciones a la ley se trata. Ignoro cuándo ni quien le otorgó el titulo a EEUU de policía del mundo, pero si conozco de tratados de extradición en casos sospechosos de narcotráfico y lavado.
ALFREDO FREITES
