Opiniones

A Pleno Sol De la corrupción

Por Manuel Hernández Villeta

Hay que detener la corrupción en la República Dominicana. No importa de donde venga. Es un gusano que se incrusta en el corazón de una parte considerable de los dominicanos.

La lucha contra la corrupción tiene que partir de realidades, y no de juicios que se convierten en sainetes. Lo primero es que haya pruebas de todas las denuncias de la comision de un acto de corrupción. El rumor público sin pruebas, puede ser un asesinato moral.

La justicia se tiene que mantener pura, limpia y fuera de ataduras, para ser una abanderada en la lucha contra la corrupción. Si este poder del Estado se postra a los poderosos podrá conseguir muy poco en esta cruzada.

Pero la justicia se debe cuidar también del espectáculo público. Los casos de corrupción se deben conocer en la solemnidad de las leyes, y no en las planas de los periódicos y los medios informativos y sociales.

Todo el que haya cometido un caso de corrupción debe ir preso, sin favortismo y sin temores. Ahora bien, con la corrupcion hay dos sectores, el que recibe y el que da. La sociedad también debe de estar limpia de recibir las migajas de los corruptos.

Hay corruptos en el sector público, pero también en el privado, que es el principal suplidor del Estado. Hay corruptos y corruptores cuando se quiere sobornar a un policía para que no aplique la ley, o a un juez para que tuerza su veredicto.

La corrupción está metida en el tuétano de la mayoría de los dominicanos, por omisión, por comisión, por beneficios, por indiferencia, o por lo que sea. Muchos de los que critican la corrupción, son los primeros que buscan beneficios en áreas marcadas por el dolo.

Hay que sentar la base de una nueva escuela política y social, para ver si las venideras elecciones están hechas en base a la reciedumbre moral, y pueden hacer frente a cualquier manifestación de hecho violador de las leyes.

Si pasamos revista a la vida pública, piense en el dinero que se tiene que invertir para salir electo regidor. Ya esto va inclinando la bandera hacia la corrupción, como forma de sostener una candidatura política. Hoy nadie sin millones de pesos disponibles, puede llegar a una candidatura a diputados.

Hay que luchar por el surgimiento de una nueva escuela de figuras públicas, donde se cimente el accionar en una verdadera lucha contra la corrupción y en defensa del patrimonio nacional. Los corruptos a la cárcel.

2014-10-20 03:33:41