Opiniones

A Pleno Sol Quemar las naves

Por Manuel Hernández Villeta

Los partidos políticos tienen su existencia en la formación de frentes de masas, en amasar intereses disímiles que por un causa común aunan esfuerzos. La unidad de los partidos políticos solo es posible con la existencia de una sóla voz, un caudillo tronante, que sea maestro y juez.

La desaparición de los tres grandes caudillos de la política dominicana lanzó al vacío a los liderazgos emergentes. Nadie ha podido tener en su partido el poder y las fuerzas que acumularon Juan Bosch, Joaquín Balaguer y José Francisco Peña Gómez.

El accionar de esos líderes impedía el surgimiento de grupos paralelos o de voces disidentes. Antes que división, lo que se dio en esos tres partidos fueron acciones disciplinarias del líder contra enemigos pequeños y emergentes.

Hoy hay una coyuntura diferente. La crisis del Partido de la Liberación Dominicana es producto de que el liderazgo es compartido entre Leonel Fernández y Danilo Medina. Nunca lleva a la unidad la convivencia de dos líderes fuertes, caminando casi hombro con hombro en sus rasgos de popularidad.

Este fraccionamiento en el PLE es producto de choques de liderazgo, de metodología de trabajo, de visión del mundo, puede llegar a ser una división total y radical, pero todavía hay tiempo para las negociaciones.

Lo primero en una mesa de negociaciones, es que se tiene que comprender que cada día hay nuevas coyunturas y con ellas se tiene que capear el temporal. En situaciones como la presente del PLD solo hay dos caminos o negociaciones y acuerdos, o el aplastamiento.

Aplicar cualquier intento de medida discipinaria en estos momentos contra los que se cree que violan disposiciones internas, sería provocar la irremediable división. Lo trágico es que los dos bandos ya quemaron las naves, y como pasó con el conquistador de México, no hay marcha atrás, solo caminos por andar.

El tema de la repostulación tiene muchos caminos a tomar, los cuales pueden evitar una división radical en el PLD. Una cosa es cierta, a pesar de sus choques, sin la unidad de Danilo y Leonel el PLD queda impedido de ganar unas elecciones presidenciales.

La unidad es lo único que garantiza una eventual victoria electoral del PLD. Aunque se acercó la tea a las naves, todavía se le puede echar agua para evitar que el incendio ocasione mayores estragos. Difícil camino, pero para los peledeistas los fuegos fatuos de San Thelmo siempre dejan una última esperanza a los marineros.

2015-05-26 18:34:13