Coalición de grupos políticos y aumento salarial
Los sectores que impulsan el proyecto político encabezado por Guillermo Moreno, proponen medidas para enfrentar la crisis por la que atraviesa el país
El Gobierno puede y debe poner el ejemplo de incrementar los sueldos a los empleados públicos, civiles y militares, lo que estimularía un aumento salarial en el sector privado.
Un incremento en los ingresos de los más necesitados compensaría en parte el deterioro de su poder adquisitivo y aumentaría el circulante para recuperar la demanda en los productos agropecuarios e industriales, creando más puestos de trabajo.
Igualmente, dedicar más recursos a los programas sociales, en especial de salud y educación, contribuiría a mejorar las condiciones de vida de la población, muy deterioradas por las últimas alzas en los precios de artículos de amplio consumo.
Para las organizaciones que conforman el proyecto político que encabeza Guillermo Moreno, es inaceptable la excusa del presidente Leonel Fernández de querer echar toda la culpa del deterioro económico a las alzas del petróleo. Tampoco es aceptable que pretenda cargar la crisis sobre los hombros de los más pobres y menos que se reduzcan los escasos servicios sociales.
El Gobierno y el Congreso pueden y deben reducir los impuestos a los combustibles para disminuir el alza del costo de la vida, especialmente en productos y servicios de primera necesidad.
También se deben reducir las importaciones en artículos suntuarios y frenar la repatriación de utilidades de las empresas extranjeras para evitar un alza de la prima del dólar, que haría más difícil la vida a los hombres y mujeres de menos ingresos.
Es cierto que han subido los precios del crudo, pero también es cierto que los beneficios del crecimiento económico de los últimos años han ido a parar a una élite gubernamental y empresarial.
También es cierto que el Gobierno ha captado cuantiosos recursos de los impuestos a los combustibles y los ha invertido en obras que no son prioritarias para el desarrollo nacional, como es el caso del Metro de Santo Domingo.
Además están los bien conocidos gastos excesivos en viajes, vehículos de lujo, restaurantes, combustibles, corrupción y otros escapes que han deteriorado las finanzas públicas.
Cuando la estabilidad macroeconómica era el caballo de batalla del Gobierno, la deuda pública se elevó a más de 14 mil millones de dólares, debido a esos gastos excesivos y el derroche en la recién pasada campaña electoral, especialmente en la compra de dirigentes reformistas y de otros grupos.
Cuando los precios del petróleo no eran tan altos, el Gobierno estimulaba las importaciones de productos que podían cultivarse en nuestros campos y aumentaba el déficit de la cuenta corriente que el año pasado superó los tres mil millones de dólares y en este puede alcanzar los US$4,000 millones. El Gobierno es el principal responsable de la crisis.
MIUCA/PCT Fuerza de la Revolución
Voluntariado Político Partido Boschista
Movimiento Nueva República
Autoconvocad@s
2008-07-17 23:22:50