La educación, como sistema tiene el deber de aportar valores y contenidos que deben ir aprendiendo los niños y adolescentes que van ingresando a las escuelas, esta llamada a ser la guía para corregir aspectos que en la actualidad amenazan la eficacia que debe promover y patrocinar el Estado para formar ciudadanos útiles al servicio de las familias y la sociedad.
En la actualidad la educación, en lo que concierne a los valores positivos, que deben ir asimilando y aprendiendo los niños y jóvenes, esta enfrentando grandes desafíos que no sólo se circunscriben a los al aporte de normas de comportamiento que deben interiorizar y poner en practica los estudiantes, sino que producto de las separaciones y divorcios en el seno de las familias , ello ha traído como consecuencia la inestabilidad que afecta a mas del 80% de las familias dominicanas.
De esta primera causa se desprende otro efecto que esta siendo muy negativo para el crecimiento educativo que debe favorecer a todos los estudiantes. En este aspecto encontramos que producto de la inestabilidad familiar la mayoría de niños y adolescentes que están asistiendo a las escuelas arrastran problemas de conducta, esto debido a la baja autoestima que nace de los divorcios y de las relaciones hogareñas inestables. Esto se traduce en bajos rendimientos en las asignaturas básicas que se están cursando.
El otro aspecto que debemos enfocar con relación a la educación es el que tiene que ver con la baja formación de los maestros, ya que en la actualidad están egresando de las universidades muchos profesores con muy baja formación profesional y como es evidente ello no contribuye al fortaleciendo de una educación de calidad al servicio de las nuevas generaciones de estudiantes.
En este aspecto se debe prestar atención al hecho de que producto de la crisis económica y moral que experimenta la sociedad en su conjunto; ello ha dado origen a que una gran cantidad de personas ingresen a las universidades a estudiar magisterio. En muchos caso se esta ingresando a estudiar magisterio, no porque se tiene vocación para la educación, sino que muchos ingresan en la carrera de Pedagogía porque la ven como un trampolín para poder ganarse algunos recursos que les permitan ??flotar? junto a los suyos.
En la mayoría de los que han estado ingresando a la carrera de Pedagogía no existe la intención de permanecer en ésta en el largo plazo. Esto debido a que el Estado no ha ido creando las condiciones e incentivos que motiven a los profesionales del magisterio a permanecer en su carrera. En este aspecto son muy pocos los sueldos y los incentivos que contribuyen a mantener motivado al magisterio nacional.
Esta situación de bajo rendimiento académico, que se advierte en el sector educativo, es mas grave porque muchos estudiantes se han ido acostumbrando a no prepararse para obtener conocimientos por encima del promedio, sino que en su mayoría se conforman con obtener un promedio en sus calificaciones que le permita una promoción de curso o de nivel, esto esta ocurriendo en los diferentes niveles del sistema educativo, y eso esta trayendo como consecuencia que la mayoría de estudiantes egresados de los centros de altos estudios no se estén preocupando por una formación profesional que lo convierta en promotores del cambio social y económico tanto en el seno de la sociedad como en el seno de sus familias.
Para lograr cambiar la situación de ineficiencia de la educación el Estado debe asumir su compromiso como principal responsable y rector del sistema educativo. En este aspecto lo primero que necesita el magisterio nacional es estar en condiciones de ser un soporte e impulsor de un sistema educativo comprometido con un buen rendimiento en los diferentes niveles educación. Para ello el presupuesto para educación debe ser respetado y asignársele a ese sector lo que establece la ley.
En este sentido el 4% del presupuesto de la nación debe ir al sector educativo y los gobiernos deben acostumbrarse a respetar esas asignaciones, como forma de contribuir a que el Estado ayude al desarrollo de la educación. En este aspecto también debemos decir que la inversión en educación, aun con ese 4% del presupuesto es muy baja, si tomamos en cuentas que hay países que invierten el 20% y hasta más de sus ingresos nacionales para apoyar el crecimiento del sector educativo.
En cuanto al magisterio nacional este debe tener, por lo menos condiciones básicas de subsistencias, ya que para poder tener una situación de salud y emocional estable el maestro necesita tener salarios que le ayuden a desempeñar su función sin las presiones y necesidades que tiene una persona cuando no tiene estabilidad en sus condiciones materiales ni emocionales.
La situación actual de ineficacia en el sistema educativo necesita del concurso de tres sectores que deben asumir el compromiso de tomar medidas y ponerlas en ejecución, única garantía para poner conseguir mejores niveles de rendimientos en la educación en su conjunto.
En la actualidad el Estado, el magisterio y las familias son tres sectores que deben tomar conciencia de la importancia que tiene para el país y su desarrollo una formación educativa que responda a las exigencias y desafíos de las empresas y los sectores productivos, ya que esa es la única garantía para conseguir mayores niveles de producción en sus negocios, ya que a mayor calidad de los recursos humanos mayores niveles de rendimientos en la producción de bienes y servicios se obtendrán en sus unidades productivas.
La creación de conciencia por parte de estos sectores en el sentido de la importancia que tienen una buena formación educativa para aumentar los estándares de vida de los pueblos es determinante para encausar el rumbo presente de la educación nacional, sólo así conseguiremos estudiantes y profesionales mas capaces al servicio de la sociedad.
Al Estado, por ser la institución rectora de la educación nacional, le asiste el compromiso y la responsabilidad de marcar el paso para que los demás sectores pasen a ocupar su espacio y su rol y así puedan asumir el compromiso de ayudar a mejorar la eficiencia que demanda el sector educativo.
Evelio Arroyo es sociólogo, Abogado y Escritor. Es, además, Director del Colegio Megas y de su Centro de Formación Pedagógica.
2009-04-23 15:07:02
