Opiniones

Negociemos con el FMI

Por: Enrique Alberto Ramírez/Periodista.

alberari@hotmail.com

El presidente norteamericano, Barack Obama, a pesar de su edad, que lo consagra, posiblemente como el mandatario más joven de America, ha demostrado ser, quizás, el más inteligente.

Ha enfrentado la crisis económica de su nación sin engaños, diciéndole a su pueblo la realidad y poniendo a cada familia norteamericana a pensar en que sus presupuestos deben de manejarse bajo disciplina, aún a riesgo de que el consumo no sea incentivado en el corto plazo.

El norteamericano ha vivido una vida de derroche, en donde el ahorro no ha sido el centro de su filosofía económica, contrario a lo que ha sucedido en otros países.

Los dominicanos, que no podemos escapar a la gran crisis internacional por nuestra dependencia con el mercado norteamericano, enfrentamos una situación muy difícil para que el gobierno pueda recaudar lo necesario en sus finanzas, aunque sea lo mínimo para sostener una política social que nos ayude a atravesar esta dificultad.

Nos han querido vender la idea de que vivimos en un mundo blindado, que no vamos a ser afectados y que tenemos toda la capacidad para sobrellevar todas las penurias de este mundo convulsionado.

Aunque no quiero pecar de pesimista, deseo ser realista; y si bien es cierto que el gobierno debe mantener ante la opinión publica y el país la esperanza, por otro lado debiera estar tomando las medidas que realmente se requiere ante la realidad de lo que acontece.

Todavía no hemos tocado fondo en las profundidades de la crisis, Sabemos que las remesas se reducen, que el turismo está mermando y conocemos que la inversión extranjera no podrá mantener los niveles ni esperar grandes inversiones en un futuro inmediato.

También nuestros empresarios sufren los embates de altos intereses, altos impuestos y reducción de la demanda interna.

Ante esta coyuntura, considero, que el país debería estar ya firmando un acuerdo de facilidad ampliada con el Fondo Monetario Internacional, que nos permita tener acceso a recursos frescos, al más bajo costo posible y que nos permita atravesar un año que, como el 2009, será recordado durante siglos por el impacto que tendrá en toda la humanidad, en términos económicos y sociales.

Este paso es más aconsejable que tener que acudir en la búsqueda de capitales y recursos externos a intereses leoninos y a endeudamientos de alto costo como sucedió en el pasado gobierno del PRD.

Si Obama ha podido hablarle a su pueblo con transparencia, creo que en el país ha llegado la hora de que, sin quitarnos la esperanza, se tomen las medidas que se requieren, como lo es negociar con el FMI que quizás permita al gobierno la flexibilidad que hoy no tiene.

2009-05-04 15:27:36