SANTO DOMINGO, el 12 de abril de 1890, el Congreso Nacional, aprobó una ley en virtud de la cual le cambió el nombre a la comunidad San Antonio del Yuna, por el de Villa Rivas.
La iniciativa fue aprobada para honrar la memoria del ciudadano Gregorio Rivas. El cambio de nombre había sido solicitado por habitantes de San Antonio del Yuna y San Francisco de Macorís, así como varios legisladores.
La ley que cambió el nombre a San Antonio del Yuna por el de Villa Rivas, fue promulgada por el Presidente Ulises –Lilís- Heureaux.