BRASILIA, 21 oct (Xinhua) — El ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, salió este miércoles en defensa de los recortes en los gastos públicos promovidos por el gobierno de Dilma Rousseff para que «el país no quiebre».
Al recibir el titulo de Ciudadano Honorario del estado de Piauí, en Teresina, capital de estado del noreste brasileño, Da Silva pidió una vez más apoyo al gobierno del Partido de los Trabajadores (PT), sin detallar en qué áreas esos recortes deben ser realizados.
La defensa de recortes en los gastos públicos levantada hoy contrasta con el reclamo del propio ex mandatario la semana pasada, cuando en el congreso de la Central Única de Trabajadores (CUT) dijo que no había que hablar en recortes «ni un solo día más».
Durante su discurso en Piauí, el ex presidente vinculó la crisis económica brasileña con la que atraviesan otros países, citando el ejemplo de Grecia.
Para Da Silva, los ataques al gobierno provienen de sectores disconformes con la lucha contra la desigualdad social impulsada por las administraciones petistas.
«¿Se olvidaron de que Dilma terminó su primer mandato con la tasa de desempleo más baja, de apenas 4,8 por ciento? Tenemos que mejorar, pero tenemos que hacer recortes para que el país no quiebre», dijo.
El ex presidente reafirmó que Brasil vive un «momento de odio», y se preguntó si la tensión política en el país es responsabilidad del PT o del gobierno.
«Vivimos en tiempo inusitado y de odio. Mucha gente enojada, precisamos conocer el origen de eso. Hay que mantener la calma. ¿Será culpa del PT? ¿Culpa del gobierno?», preguntó.
«La élite nunca se preocupaba por los pobres. Me alegro de ver que más de tres millones de jóvenes están en la universidad gracias a la beca del Prouni (Programa Universidad para Todos). Son esos datos que molestan (a la elite)», enfatizó. Fin
2015-10-21 18:39:35
