Raúl Martínez se lanza contra Lincoln Díaz-Balart

AP



El ex alcalde de Hialeah Raúl Martínez anunciará mañana martes su candidatura al cargo de representante federal que ocupa actualmente el congresista republicano Lincoln Díaz-Balart.



Poniendo fin a una ola de especulaciones en las últimas semanas, Martínez, un peso pesado del Partido Demócrata, confirmó esta tarde la postulación en declaraciones a El Nuevo Herald.





«Ya está decidido, y mañana por la mañana voy a declarar mi intención de ser candidato por el asiento correspondiente al distrito 21», dijo Martínez en una conversación telefónica.



El enfrentamiento político entre Martínez y Díaz-Balart será una de las contiendas electorales más electrizantes que haya visto el sur de la Florida, ya que ambos tienen fuertes personalidades y su rivalidad política es pública.



Díaz-Balart y Martínez difieren prácticamente en todo, desde política interna hasta detalles de las relaciones con Cuba. Esta será la primera postulación de Martínez al escaño y la novena de Díaz-Balart, quién hasta ahora ha ganado abrumadoramente desde que se postuló por primera vez en 1992.



Martínez dijo este lunes que su candidatura responde a la necesidad de «atender los problemas verdaderos del distrito, los problemas diarios, cosa que en este momento no se está haciendo».



«Me preocupa la falta de trato que el congresista [Díaz-Balart] le ha dado a las necesidades de la gente, como el alumbrado público, vivienda, educación, trabajo, todas esas cosas», afirmó.



«Quiero llevar al Congreso un debate lo más bipartidista posible, ya que necesitamos más cooperación y menos discusión», enfatizó Martínez.



La mayoría de los electores de Martínez y Díaz-Balart son cubanoamericanos y la situación de la isla será un tema importante en esta campaña que se avecina.



«El embargo no debe ser tocado de ninguna forma. En eso el congresista y yo no tenemos una visión diferente. Lo que pasa es que él no cree en los valores familiares y por eso creo que ha sido un error de la administración republicana impedir que los cubanos residentes puedan viajar a Cuba y limitar el dinero que pueden enviar a sus familiares», consideró Martínez.



Y acotó: «¿Cómo se puede hablar de enviar dinero a los disidentes cuando no se le puede mandar dinero a la familia?».



A la vez, también contactado telefónicamente, Díaz-Balart no perdió un segundo en fustigar a su opositor.



Dijo que la decisión no le sorprende, pero aseguró que está preparado para la campaña que se avecina.



«Voy a basarme en mi expediente de servicio», dijo el congresista a El Nuevo Herald. «Me siento orgulloso de representar a Hialeah y el extraordinario apoyo que siempre he recibido del pueblo de Hialeah».



Acto seguido apuntó lo que considera «las grandes diferencias» con el ex alcalde de La Ciudad que Progresa.



«La recurrente vulgaridad del señor Martínez y su uso crónico de cargos públicos para su enriquecimiento económico personal manifiestan una falta de respeto hacia el electorado y confirman que él no es apto para una posición de confianza», aseveró el legislador federal.



Díaz-Balart se refería a la saga judicial que Martínez enfrentó a fines de la década de 1980, cuando fue acusado de corrupción y chantaje en su paso por la alcaldía. El ex alcalde luchó por tres años para limpiar su nombre y, eventualmente, la fiscalía federal no prosiguió el caso.



«Creo que los oficiales electos no sólo deben actuar con integridad, sino también con respeto hacia aquellos que representan», agregó Díaz Balart.

RUI FERREIRA Y HELENA POLEO

El Nuevo Herald



rferreira@herald.com

2008-01-22 04:17:12