Economia

BM recomienda áreas prioritarias de política pública para hacer frente a la desigualdad en RD

Santo Domingo, RD, 20 de Febrero.-El Banco Mundial recomienda a la República Dominicana promover una política fiscal equitativa, eficiente y sostenible, la efectividad y transparencia institucional y el desempeño del mercado laboral como las áreas prioritarias de política pública para hacer frente a las causas subyacentes de la desigualdad económica y social que observa en el país.

La recomendación está contenida en el informe «Cuando la Prosperidad no es Compartida: Los Vínculos Débiles entre el Crecimiento y la Equidad en la República Dominicana» lanzado la noche del miércoles en el salón Verde del Palacio Nacional, auspiciado por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD) dentro de los actos conmemorativos de su octavo aniversario y en presencia del titular de la institución, ingeniero Temístocles Montás.

En el marco del lanzamiento del documento se llevó a cabo el panel: «Equidad de Género y Movilidad Social: Las experiencias más recientes de América Latina y República Dominicana, Retos de Política Pública», informó la Unidad de Comunicaciones del MEPyD.

La presentación del informe estuvo a cargo del asesor regional en temas de Pobreza para Europa y Asia Central del Banco Mundial, Luis Felipe López Calva y del economista senior del Grupo de Pobreza, Género y Equidad para la Región de Latinoamérica y el Caribe, Javier Báez, quienes dirigieron el estudio bajo la dirección de la gerente del sector de Reducción de Pobreza, Género y Equidad del BM, Louise J.Cord.

El informe considera que para hacer frente a las causas de la inequidad el país necesita construir instituciones transparentes y eficientes que promuevan la inclusión económica y social a través de una mejor prestación y calidad de los bienes y servicios públicos.

Plantea como prioridad la ampliación de las oportunidades económicas, el incremento de la movilidad económica ascendente y la protección de los dominicanos vulnerables a los choques negativos.

Además, recomienda fortalecer el acceso de los pobres al mercado laboral e incrementar la demanda por su mano de obra, de manera que se haga un uso eficiente del capital humano y facilite que los pobres se beneficien del crecimiento económico del país.

«A pesar del fuerte crecimiento económico de la última década, aún subsisten grandes inequidades en la sociedad dominicana, inequidades que han disminuido a un ritmo menor del esperado», señala el documento del Banco Mundial

La Introducción de la actividad estuvo a cargo del ministro Montás, quien consideró que en América Latina todavía no ha sido posible desde la óptica de las políticas públicas dar una respuesta efectiva para la conducción de sociedades más inclusivas.

De su lado, la Gerente del Sector de Reducción de Pobreza, Género y Equidad del Banco Mundial, Louise J. Cord, dijo que en América Latina la pobreza sigue bajando, pero menos rápido, reflejando una reducción de las tasas de crecimiento económico y también un estancamiento en la tendencia de bajar la desigualdad.

Cord estuvo acompañado del representante del Banco Mundial en el país, Benjamín MC Donald.

El estudio del Banco Mundial señala que el PIB per cápita creció en República Dominicana casi un 50% del 2000 al 2011, sin embargo, muchos de los 10 millones de habitantes del país no pudieron beneficiarse de este crecimiento.

Indica que la pobreza moderada se redujo sólo a la mitad del aumento dramático que hubo después del único proceso de retroceso del crecimiento de la década, la crisis económica del 2003-2004.

«La pobreza crónica, en la que la gente sufre largos y persistentes episodios de privación, sigue siendo alta», precisa el informe «Cuando la Prosperidad no es Compartida: Los Vínculos Débiles entre el Crecimiento y la Equidad en la República Dominicana».

El documento refiere que más preocupante aún es el hecho que casi una tercera parte de la población es pobre a pesar de tener las habilidades y los activos para generar un ingreso mayor.

Sostiene que el país tiene una baja movilidad económica, con menos del 2% de la población escalando a un grupo de mayores ingresos durante la década, comparado con un promedio del 41% en la región de América Latina y el Caribe.

Señala que a pesar de la mejora en el acceso a bienes y servicios básicos como agua y educación, la cobertura y la calidad siguen siendo desiguales, limitando así las oportunidades económicas de muchos dominicanos de bajos ingresos.

El asesor en temas de pobreza para Europa y Asia Central del Banco Mundial, López Calva dijo que siguiendo el patrón que se observa en otros países de la región, la clase media en la República Dominicana tiende a optar por salirse del contrato social, demandando servicios privados y evitando contribuir con los bienes públicos.

De su lado, el economista senior del Grupo de Pobreza, Género y Equidad del Banco Mundial para la Región de Latinoamérica y el Caribe, Báez destacó que en la última década, además de la modesta reducción de la pobreza, la República Dominicana ha fomentado muy poco la movilidad económica ascendente, lo que se traduce en un estancamiento de la clase media.

Panel de expertos

El presidente del Consejo Europeo de Investigaciones sobre América Latina (CEISAL) y vicepresidente encargado de relaciones internacionales del Instituto de las Américas, Carlos Quenan comentó la presentación del estudio en la parte de América Latina.

Quenan consideró fundamental avanzar en la calidad de la educación y protección social, además de los objetivos planteados por el informe del Banco Mundial.

El estudio sobre República Dominicana fue comentado por el director ejecutivo del Centro Bonó, Roque Feliz y la directora de la Unidad Asesora de Análisis Económico y Social del MEPyD, Magdalena Lizardo.

Feliz consideró importante que la población se empodere para exigir mejores políticas públicas y mayor acceso a los servicios.

De su lado, Lizardo dijo que además de los tres ejes planteados por el Banco Mundial, añadía las políticas de desarrollo productivo que permitan generar empleos y elevar la productividad.

La directora de la Unidad Asesora de Análisis Económico y Social del MEPYD propone un contrato social que permita compartir las ganancias de esas posibilidades y mayor empleo asociado a un desarrollo productivo.

La introducción de Montás

En su discurso de introducción del acto de lanzamiento del informe, el ministro de Economía, Montás manifestó que en la región se ha producido avances importantes, pero no en la magnitud de pensar que América Latina se encamina hacia la conducción de sociedades más inclusivas

«Estamos muy lejos de pensar en que avanzamos con pasos firme a la conducción de sociedades inclusivas», insistió Montás.

El funcionario recordó que Brasil a principio de los años 80 llegó a tener, antes de la crisis de la deuda de esos años, un ingreso per cápita de US$ 7, 600 y la clase media representaba el 29% de la población.

«Pero resulta que Corea del Sur llegó a más o menos a ese mismo nivel del ingreso per cápita en el año 1987, lo que Brasil logró en los primeros años de la década de los 80 lo logró Corea en el 1987», dijo.

Indicó que con la diferencia de que cuando Brasil llegó a ese nivel, la clase media en Corea era 53%.

«La pregunta es qué fue lo que hicieron los Coreanos que no hicieron los brasileños», se preguntó Montás.

Consideró que ese nivel de ingreso per cápita y la clase media de un 53% convirtió a ese sector en un motorizador del crecimiento económico en Corea y permitió que a pesar de los problemas que tuvo cuando la crisis asiática siguiera creciendo y hoy la clase media representa el 93% de la población.(HG).

2014-02-20 19:01:41