Economia

Generadores sugieren alianza público-privada para solución eléctrica

Santo Domingo, RD, 29 de octubre.- Marcos Cochón, presidente de la Asociación Dominicana de la Industria Eléctrica (ADIE), defendió la fórmula de la alianza público-privada que ha dado frutos positivos en el sector de la generación para abordar planes en otras áreas del sistema eléctrico nacional para lograr el fin de su crisis y que sea estable, de calidad y sostenible financieramente. Para ello, apeló al cumplimiento de ciertos preceptos que él llamó «10 mandamientos».

Cochón habló en calidad de orador y huésped de honor en el Almuerzo Mensual de la Cámara Americana de Comercio de la República Dominicana (AMCHAMDR), celebrado este miércoles en el Hotel Sheraton de Santo Domingo. El contenido de su discurso estuvo relacionado con ideas y contenidos que la organización que preside entiende deben ser abordados en las reuniones del Pacto Eléctrico, pendiente de iniciarse en el seno de Consejo Económico y Social (CES).

«Asistiremos con la intención de provocar que el Pacto se constituya en la plataforma que siente las bases para las acciones que, como país, nos permitan, en un futuro no muy lejano, contar con un sistema eléctrico estable, de calidad, financieramente sostenible y en el que interactúen, de manera organizada y previsible, reguladores independientes y productores y consumidores responsables», explicó quien también es gerente general de la Compañía Eléctrica de Puerto Plata (CEPP).

Cochón mencionó los avances en la diversificación de la matriz que ha logrado el país gracias a las inversiones y gestión que se han hecho en el subsector de la generación de energía «A pesar de todo lo que se dice de nuestro trabajo en tono despectivo, le han permitido a la República Dominicana llegar a mediados de la segunda década del siglo XXI con una matriz energética más diversa, competitiva y de mayor calidad que la que existía durante las últimas tres décadas del siglo XX», dijo.

Luego añadió que ese éxito se ha producido a pesar de que la fórmula de la alianza público-privada no ha sido ejecutada a plenitud por haberse dado en un ambiente incoherente, inestable e insostenible.»¿Cómo se pretende esperar que el sector privado invierta en nueva generación si no se convocan las licitaciones? ¿O es acaso que el mismo Estado promueve y espera que el sector privado incumpla las leyes para realizar nuevas inversiones? Es algo para discutir y corregir en el Pacto Eléctrico, ya que ha constituido una barrera de entrada a muchas inversiones», manifestó.

Antecedentes y actualidad

Antes de ahondar en la idea de las alianzas público-privadas como herramienta para solucionar la crisis eléctrica nacional con garantías de futuro, Marcos Cochón situó a los asistentes al evento en la realidad que tiene hoy el sistema, partiendo del impacto ocasionado por el sector generador desde que se produjo la capitalización y hasta el pasado mes de septiembre.

En materia de inversiones, el presidente de ADIE dijo queen los últimos 15 años han ascendido a más de 2,500 millones de dólares en la construcción de nuevas plantas, reestructuración de otras, mejoras de gestión e infraestructuras, conversiones y otras labores que han transformado la matriz dominicana para hacerla menos dependiente de los derivados del petróleo. «En el año 2000, el 90% de la energía del país se generaba a partir de ellos. Hoy en día, si bien la capacidad instalada sigue siendo dominada por plantas que funcionan con esos combustibles, muchas de ellas son plantas marginales o de reserva, y no entran en operación de manera continua. Como resultado de esas inversiones realizadas a través de alianzas público-privadas, alrededor del 60% de la energía que se ha venido sirviendo en el país se genera con agua, gas natural, carbón y viento».

En cambio, por el lado de la distribución, Cochón dijo que sus pérdidas, que eran cercanas al 42% en 1999, hoy todavía rondan el 33%. «La República Dominicana es el único país de América Latina y del mundo que no puede mostrar una mejora significativa en este indicador quince años después de haber iniciado esfuerzos para ello. Otros países lograron reducir sus pérdidas del 30% al 10% o menos en 7 u 8 años, nosotros no lo hemos hecho».

También afirmó que los cobros, como porcentaje del ingreso corriente requerido para operar, habían caído del 44.3% en 1998 a 36% en 2012, «y el total de los subsidios otorgados por el Gobierno Central para cubrir las pérdidas operativas de las compañías distribuidoras y para subsidiar la tarifa a todos los consumidores han aumentado del 18% al 32% durante el mismo periodo». Y aprovechó para explicar cómo en 1998 la CDE debía más de $600 millones a bancos nacionales y extranjeros, $100 millones a suplidores y $40 millones al Banco de Reservas. «Hoy en día se mantienen montos superiores, con la diferencia de que los principales acreedores son las empresas generadoras de electricidad». La deuda con los generadores batió un récord en septiembre al superar los US$900 millones.

Después de presentar algunos datos procedentes de un informe preparado por la firma Analytica en el que se ofrecen algunos datos sobre impacto directo del sector generador en la economía dominicana después de la capitalización, Marcos Cochón ofreció otros incluidos en un informe que prepara mensualmente ADIE sobre el estado de situación del sector eléctrico a partir de datos de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales.

«Hay capacidad instalada para generar toda la energía que necesita el país, pero las Distribuidoras no la adquieren y provocan apagones por déficit en la compra de energía. En septiembre, no haber comprado 215 gigawatios/hora para satisfacer la demanda real provocó apagones. Incluso después de haberla satisfecho, hubiera sobrado energía disponible porque la capacidad instalada supera dicha demanda total», explicó el ejecutivo eléctrico.

También se refirió al precio promedio al que las Distribuidoras adquirieron la energía que sirvieron en los siete primeros meses del año. «Fue de USCent$16.77 por kWh, mientras que lo facturaron a un precio promedio de USCent$18.55, resultando del ejercicio un margen de venta de USCent$1.79 por cada kWh».

Diez mandamientos

En la parte final de su exposición, el presidente de ADIE retomó la idea de apelar a las alianzas público-privadas y enumero una lista de diez mandamientos que deberían respetarse para que en la fórmula pueda garantizarse la participación sostenible del sector privado:

1. Obtendrás el compromiso del gobierno y el consenso político de las fuerzas políticas que den mayoría en el congreso

2. Informarás al público del proceso a seguir, de sus ventajas y sus costos

3. Desarrollarás la participación en un marco jurídico completo y flexible, con reglas de juego claras y transparentes

4. Harás el proceso de asignación sin quemar etapas y seleccionarás al grupo más capacitado para la construcción, operación y financiamiento

5. Pondrás los mejores funcionarios en los organismos reguladores, les darás independencia del gobierno y del sector privado y les darás autoridad y jerarquía igual al del sector privado

6. Comprometerás al sector público y al sector privado en el éxito de la operación;

7. No mezclarás objetivos sociales con los comerciales;

8. Repartirás con justicia los costos y beneficios;

9. Darás al sector privado los incentivos necesarios para su participación, pero solo los necesarios;

10. No permitirás que los esquemas de mitigación de riesgos de un proyecto atenten contra el proceso de participación del sector privado.

«El pasado de las alianzas público-privadas nos enseña que, gracias a haber cumplido con los mandamientos 1, 3, 4 y 9, por ejemplo, se logró incrementar la capacidad instalada, diversificar la matriz energética, reducir los costos de generación medios, y tener menor impacto ambiental. Sin embargo, al no haber cumplido los mandamientos 5, 6, 7 y 8, no se han aumentado los cobros, no se han reducido las pérdidas y se mantiene el déficit de suministro. Y por incumplir el décimo mandamiento las inversiones en generación han sido menores que las esperadas», dijo Cochón.

El presidente de la ADIEN reclamó el cumplimiento de la ley en lugar ejecutar solo una parte de ella, lo que por ejemplo le ha costado al país caro en el caso de la decisión de intervenir la tarifa y establecer «un subsidio que, con el paso de los años, se ha convertido en un serio problema fiscal. Se tomó la decisión de no transferir el costo real de la electricidad a los consumidores en un momento en el que el precio del petróleo era bajo. El Estado hizo un análisis de riesgos equivocado, no se quiso cubrir y acabó pagando la volatilidad de los precios de los commodities, entre ellos, del crudo».

También mencionó otro incumplimiento referente al sistema de licitaciones públicas para nueva generación y para nuevos contratos. «Desde la autoridad se ha practicado la modalidad de ?propuestas no requeridas?(Non RequestedProposals). Los miembros de ADIE siempre han estado dispuestos a participar ?y de hecho han participado- en procesos transparentes y estamos ante un momento en el que habrá que hacer nuevas licitaciones para los nuevos contratos porque va a ser la mejor manera de obtener precios de energía competitivos para las distribuidoras. Sin embargo, las señales que se están enviando en este sentido no son las adecuadas».

Para concluir su presentación, Marcos Cochón dijo que llegó la hora de las decisiones contundentes, de reconocer sinceramente que las autoridades deben iniciar un proceso de cambios sin vuelta atrás de manera inmediata. «No podemos seguir perdiendo tiempo y por ello venimos reclamando desde enero pasado la convocatoria del diálogo para el Pacto Eléctrico. De esa manera tendrán el respaldo adecuado de todos para alcanzar el éxito en la ejecución de los planes».

Fue reiterativo al afirmar que, si algo se ha avanzado desde la capitalización es en generación, «mediante fórmulas mixtas de alianzas público-privadas. ¿Por qué no aplicarlas también para transformar las Distribuidoras de barril sin fondo a empresas rentables?». El presidente de ADIE anunció que la ADIE promoverá dicha alternativa en las discusiones del Pacto Eléctrico. «Ante la situación actual de las finanzas públicas, entendemos, como entiende el Presidente Medina, que las alianzas público-privadas son la alternativa más idónea y expedita para llevar adelante los procesos de inversión y transformación que requiere el sector eléctrico dominicano».

Cochón dijo que si el objetico del país es establecer lo antes posible un sistema en el que las distribuidoras compren y paguen a tiempo toda la energía que necesitan, facturen toda la electricidad que sirvan, cobren toda la electricidad que facturen y se gestionen de manera eficiente, «debemos establecer una alianza público-privada orientada a ello. Y debemos evitar los errores del pasado que han intercedido negativamente en el desarrollo de dicha alianza».

Profundizó en sus afirmaciones diciendo que muchas de las causas que dieron origen a las primeras alianzas público-privadas en el sector de la electricidad todavía están vigentes: la escasez de los recursos del Estado, los déficits de las empresas de servicios públicos, la baja calidad y mala cobertura de los servicios y la necesidad de generar recursos para que el Estado pueda incrementar la inversión social y para reducir el impacto en el Presupuesto de la Nación.»La experiencia positiva de los aportes logrados por las empresas generadoras de electricidad durante los últimos 15 años, y la experiencia que vive en estos momentos el Estado dominicano para llevar adelante el Proyecto de Punta Catalina, nos llevan a la conclusión -y nos permite afirmar- que las alianzas público-privadas son una opción posible y viable para aportar mucho a la solución de la crisis histórica del sector eléctrico de la República Dominicana».

Palabras de Máximo Vidal

Antes de la presentación del Ministro, Máximo Vidal, presidente de AMCHAMDR, tuvo unas palabras en las que, por un lado, manifestó la posición de la Cámara con respecto al sistema eléctrico y, por otro, reclamó de las autoridades que se den los pasos para que la libre competencia llegue al transporte terrestre de carga.»AMCHAMDR planteó su posición sobre el sector eléctrico a principios de año. A modo de recordatorio, les comento que nuestra organización defiende el diálogo transparente como fórmula para lograr puntos de consenso que conformen el Pacto como punto de arranque para solucionar la crisis del sistema y garantizar su calidad y sostenibilidad mediante el respeto al Estado de Derecho», dijo Vidal.

La Cámara cree en una solución de la crisis eléctrica desde una visión integral con la mirada puesta en el largo plazo. «En tal sentido, entendemos que deben sentarse las bases para acciones que nos permitan atraer inversiones en generación cada vez más barata, eficiente y respetuosa del medio ambiente, mejorar las redes de transmisión, infraestructuras y sistemas de gestión para, a su vez, reducir las pérdidas de distribución y comercialización a mínimos aceptables. A ello hay que añadir el trabajo para concienciar a la sociedad para hacer un uso racional de la electricidad. Todo ello debe llevarnos a una reducción sostenida del subsidio mediante una verdadera focalización hacia los sectores más vulnerables del país en aras de una mayor estabilidad macroeconómica», manifestó el presidente de AMCHAMDR.

En cuanto al tema del transporte terrestre de carga, tras destacar la importancia que tiene para la competitividad del país, Vidal dijo que, a partir de hechos recientes «han vuelto a quedar en evidencia la necesidad que existe de que los gobiernos promuevan en ese sector la libre competencia que recogen como práctica nuestras normativas nacionales».

AMCHAMDRha pedido a las autoridades en varias ocasiones que garanticen el flujo de bienes por el país y, así, asegurar el suministro de mercancías desde y hacia los puertos, aeropuertos y centros de abastecimiento del territorio nacional. «La paralización del libre flujo de bienes tiene consecuencias nefastas para la economía dominicana y las situaciones mencionadas se podrían evitar si en el sector del transporte de carga se aplicaran los principios de libre empresa y contratación de servicios. Fruto de la ausencia de libre competencia real en dicho sector, la República Dominicana pierde competitividad frente a otros mercados, a la vez que se cierra puertas para una mejoría de la calidad de vida de la población», manifestó Vidal.

Para finalizar, antes de presentar al orador y huésped de honor del Almuerzo Mensual, dijo que, «mantener las condiciones monopolísticas del sector del transporte terrestre en el país no ayudará a cumplir con la Estrategia Nacional de Desarrollo cuando establece la conversión de la República Dominicana en hub logístico comercial de la región como clave para desarrollar la nación».(HG).

2014-10-29 21:29:32