Mel Gibson dice que se siente mal por Michael Richards
LOS ÁNGELES (AFP) – El actor y director de cine estadounidense Mel Gibson afirmó que se «siente realmente mal» por el momento que atraviesa el comediante Michael Richards, el ‘Kramer’ de ‘Seinfeld’, tras haber lanzado insultos racistas en un espectáculo.
«Me siento realmente mal por él. Era obvio que estaba en un estado de estrés. No hay que estar borracho para salirse de sí», dijo el director del esperado estreno de ‘Apocalipto’ en una entrevista a la revista Entertainment Weekly colgada en la ‘web’ y que saldrá a los quioscos el próximo 8 de diciembre.
«Probablemente lo torturen un poco y luego lo dejen. Él me gusta», opinó Gibson sobre Richards, que la semana pasada lanzó un torrente de insultos racistas a un espectador en un club californiano, provocando la cólera del público, que abandonó la sala, además de una polémica tan fuerte en el país como la provocada por Gibson a mediados de año por insultos antisemitas.
Una filmación casera del incidente, divulgada por el sitio internet sobre las estrellas ‘Tmz.com’, mostró a Richards reaccionando furioso después de que los hombres le gritaran que no era gracioso.
«Habla, habla, ahora eres valiente hijo de puta. Que lo echen. !Es un negro! !Es un negro! !Miren, hay un negro!», gritó el comediante tras una serie de epítetos, utilizando el término «nigger», muy insultante en Estados Unidos.
«Me apena lo que sucedió y le pido disculpas al público, a los negros, a los latinos y a los blancos, todos los que estaban allí y padecieron ese enojo, ese odio», manifestó el comediante en la cadena de televisión CBS sin lograr calmar las aguas.
Organizaciones y líderes de minorías han llamado a boicotear su trabajo y hasta la compra de DVD de la serie ‘Seinfeld’.
Gibson, de 50 años, fue arrestado en julio conduciendo en estado de ebriedad y luego trascendió que había insultado con dichos antisemitas a uno de los policías, por lo que también se hicieron llamados a que Hollywood boicoteara los trabajos del director de ‘La Pasión de Cristo’, mientras él pidió perdón en comunicados y programas de televisión.
En esta entrevista con Entertainment Weekly volvió a negar que sea un antisemita: «Nunca lo he sido ni lo podría ser.
Pero (el incidente) clavó este miedo en mí. Dios mío, he asustado a la gente, y fue una sensación horrible. Entonces dije, Dios mío, no quiero ser ese tipo de monstruo».
Desde el episodio el actor asiste a una clínica de alcoholismo, adicción que padece desde hace varios años.
2006-12-01 17:21:10
