Cultura

Clint Eastwood seduce en Cannes con cinta basada en hechos reales

Clint Eastwood seduce en Cannes con cinta basada en hechos reales



Changeling, que participa en la selección oficial, recibió una doble ovación al finalizar su proyección; aunque la actuación de Angelina Jolie ha sido criticada.



EFE

Clint Eastwood ha dado hoy de nuevo una lección de cine en Cannes, donde ha seducido con una emotiva historia basada en hechos reales, sobre la desaparición de niños y la corrupción policial, y lo ha hecho a pesar de Angelina Jolie, su protagonista.



Changeling, en competición oficial en Cannes, recibió una doble ovación al finalizar su primera proyección y, sobre todo, Eastwood fue aclamado al entrar en la sala de la conferencia de prensa y aplaudido en varias ocasiones durante la misma.



Un poco excesivo para la película aunque comprensible por la trayectoria de un actor y director que se dio a conocer con los «spaghetti western» y ha acabado siendo uno de los realizadores más sensibles y con más oficio de la industria cinematográfica.



Y esa experiencia se ve en Changeling, donde todo encaja a la perfección. Un guión que funciona como la maquinaria de un reloj suizo, unos movimientos de cámara precisos, excelente fotografía, preciosa y emocionante música y unos actores secundarios impecables.



Lo único que ha sido cuestionado: Angelina Jolie, quien no encuentra nunca el tono del personaje.



Basada en hechos reales, ocurridos en Los Ángeles en los años veinte, Jolie interpreta a Christine Collins, una mujer independiente y moderna para la época que cría sola a su hijo, hasta que un día éste desaparece.



Comienza en ese momento una historia kafkiana con una policía corrupta (similar a la de L.A. Confidential) que trae de vuelta a Christine a un niño diciéndole a ella y a todo el mundo que es su hijo, cuando no lo es. Y sólo la ayuda un reverendo, interpretado por John Malkovich.



Sin grandes sorpresas en un guión que va en constante crecimiento, Eastwood construye un gran filme. No es el mejor de su carrera como director, pero da gusto ver una película en la que todo está donde debe estar.



Un Eastwood de 78 años, que impresiona por su altura, por lo vivido que refleja su cara e incluso por su evidente sordera, afirmó en rueda de prensa que la historia que cuenta la película es «un gran estudio de características humanas», de cómo «una sola mujer lucha contra toda una ciudad».



La película se centra en dos temas. El primero, la desaparición de niños, sobre lo que Eastwood indicó que la pedofilia o la delincuencia contra niños «son los crímenes más abyectos que se pueden imaginar».



Con esta historia, «se pone de nuevo en cuestión a la humanidad» y demuestra hasta qué punto «los seres humanos pueden ser terribles».



El segundo tema de la película es la corrupción policial.



Al respecto, indicó que cada dos ó tres décadas, el departamento de policía de Los Ángeles sufre una revolución en su estructura política a causa de la corrupción y la película muestra uno de esos momentos.



En la historia que cuenta Changeling cuyo título podría ser cambiado por The Exchange, se añade el elemento de que Christine es una madre soltera, algo que pudo jugar en su contra en aquel momento.



Para preparar ese papel, Angelina Jolie señaló que como madre se podía imaginar el «dolor y la frustración» de Christine, pero que necesitaba «algo más». Ese elemento vino del dolor, pocos meses antes de iniciar el rodaje, por la muerte de su madre.



En cuanto al trabajo con Eastwood, la actriz reconoció haber estado nerviosa el primer día de rodaje, pero la capacidad de liderazgo del director lo hace todo más fácil, afirmó.



«Cada persona en el set lo respeta. No he visto a nadie ser más respetado que él», agregó.



Al ser preguntado por consejos para nuevos directores, el responsable de Los Imperdonables o Million Dollar Baby se limitó a decir: «Continuar siempre. Creer en ustedes y alguien terminará por creer. Cada vez que cierren una puerta, perseverar».



Y bromeó: «Aunque si se parecen a Angelina no les cerrarán muchas puertas».



Preguntado por su ausencia del filme como actor, dijo ser «demasiado joven para interpretar a uno de los niños», ante las risas de los periodistas, para añadir que no había ningún papel adecuado para él.



Además resaltó que de forma gradual cada vez pasa más tiempo detrás de la cámara que delante.



Vestido con un traje blanco y camisa y corbata grises, Eastwood se mostró encantado de estar en Cannes y consideró que si se viene a un Festival como éste, «hay que estar en la competición oficial».



Y sobre sus opciones a la Palma de Oro, tanto él como Jolie insistieron en que estar en Cannes ya es un premio.



Respecto a la película Dirty Harry, que se proyectará el próximo viernes en Cannes y que es uno de los trabajos clave en su carrera como actor, Eastwood resaltó que hace 37 años cuando se rodó, fue una «gran aventura».



«Mostraba a un tenaz policía al que no para la burocracia para defender a las víctimas. En aquella época no había muchas películas con el punto de vista de las víctimas», por lo que provocó «tensiones» y reacciones contradictorias.



Por ello, se mostró «orgulloso». Pero eso no quiere decir que vaya a retomar el personaje, como han apuntado algunos rumores. «No podría estar en el departamento de policía a mi edad», afirmó con una sonrisa.

2008-05-20 18:25:32