Autorretrato desconocido de Rembrandt causa sensación
En octubre pasado, un comprador anónimo pagó varios millones de dólares menos por la obra que luego fue autentificada como realizada por el maestro flamenco.
AP
La casa subastadora supuso que el pequeño retrato era una imitación de Rembrandt y la valuó en 1.500 libras (3.100 dólares). Pero el comprador inglés que pagó por él 1.500 veces más, aparentemente sabía lo que hacía.
Los expertos confirmaron que Rembrandt Risueño -adquirido por un precio irrisorio de 2,2 millones de libras (4,5 millones de dólares) durante una remate en octubre- es un autorretrato del maestro holandés del siglo XVII.
«Ese cuadro claramente vale entre 15 y 20 millones de libras» (de 30 a 40 millones de dólares), dijo William Noortman, de Noortman Master Paintings, casa especialista en maestros holandeses y flamencos.
«Me sorprende mucho que no obtuviera más en la subasta», comentó ayer.
El cuadro de 24,1 por 16,5 centímetros (9,5 por 6,5 pulgadas) se exhibe ahora en el Museo Casa Rembrandt en Amsterdam hasta el 29 de junio, a préstamo del británico anónimo que lo compró en la subasta de Moore, Allen and Innocent en Gloucestershire y que lo hizo limpiar y examinar por expertos británicos.
Rembrandt pintó el autorretrato alrededor de 1628, cuando tenía poco más de 20 años y todavía vivía en su ciudad natal de Leiden. Ya para ese entonces estaba ganando fama como artista y experimentaba con un espejo para captar expresiones en su propio rostro.
«Tiene una presencia increíble», dijo Ernst van de Wetering, titular del Proyecto de Investigación Rembrandt y autoridad en el pintor holandés. «Tiene la calidad de luz más natural que se pueda concebir».
«Me encanta, y me encanta la naturalidad de la risa», agregó.
La pintura había estado en manos de una familia inglesa durante más de cien años, según Moore, Allen and Innocent.
Algunos supusieron que era de alguno de los estudiantes de Rembrandt o quizás un imitador.
Van de Wetering opinó que la escasa valoración de la casa subastadora se basó en fotografías deficientes que no reflejaban la luminosidad ni la profundidad de la pintura.
Pero en un análisis de 23 páginas publicado el viernes en el Kroniek van het Rembrandthuis, la publicación del museo, van de Wetering describe por qué Rembrandt fue casi con seguridad el creador de la obra.
Dice que las pinceladas, contorno, material y el monograma apuntan todos a la mano del maestro.
2008-06-19 18:21:29