By Aeturo Arias Polo
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La actriz y directora cubanoespañola Nena Acevedo, una de las figuras más destacadas del movimiento teatral del exilio cubano, falleció el jueves en Miami. Tenía 94 años.
Considerada una de las artistas más entusiastas de la escena local desde que arribó a Miami en la década de 1970, Acevedo se ganó el afecto de sus colegas y el público a través de los personajes que interpretó y de su labor pedagógica.
«Nenita se caracterizaba por su sonrisa, su disposición y ese guiñito donde se perdían sus ojos cuando reía. Era eléctrica, ocurrente, directa y despistada», recordó la actriz Teresa María Rojas, una de sus alumnas de actuación en el grupo Teatro Universitario de la Universidad de La Habana. «Ella vivió para el teatro y por el teatro. Llegué a adorarla».
Damas retiradas, Las pepillas de El Vedado y El hombre, la bestia y la virtud, la zarzuela La dolorosa y comerciales de televisión aparecen en el listado de producciones en que participó Acevedo a lo largo de cuatro décadas.
Carmen Acevedo nació en junio de 1916 en El Valle de Oro, un pueblo ubicado en la provincia española de Lugo. Pero a los 3 años de edad se trasladó a Cuba con su familia. A partir de 1941, año en que debutó en el Teatro Universitario de La Habana con la obra Numancia, de Miguel de Cervantes, no dejó de actuar y dirigir. Paralela a esta labor, impartió clases a enfermos mentales en el sanatorio de Mazorra y organizó representaciones en el poblado de Güines.
Antes de salir de Cuba rumbo a Puerto Rico la actriz integró el reparto de la comedia Mujeres, de Clare Boothe, un taquillazo dirigido por María Julia Casanova y Cuqui Ponce de León que tuvo 324 representaciones en la sala Hubert de Blanck del Vedado. Durante los siete años que vivió en Puerto Rico participó en una obra de Tennessee Williams y enseñó teatro en el Colegio Puertorriqueño de Niñas.
«En Cuba estaba considerada una actriz `seria’. Pero eso no impidió estuviera estupenda en Mujeres. Sin embargo, cuando llegó al exilio desarrolló con éxito su faceta de comediante», afirmó su amigo, el actor Mario Martín, que compartió con ella los papeles estelares en El hombre, la bestia y la virtud. Acevedo se presentó por última vez en Lola, un montaje de Teatro Avante dirigido por Mario Ernesto Sánchez, en 1996.
«Nena fue un nombre imprescindible en el desarrollo del teatro en Miami. Cuando no actuaba, estaba en la primera fila de la platea. Y si no le gustaba la función, no tenía reparos en expresar su criterio. ¡Ella no tenía `pelos en la lengua!», dijo Sánchez, que destacó el trabajo de la actriz en el grupo Chicos, dirigido por Marta Llovio.
Hasta hace apenas unos meses Acevedo vivía sola en su apartamento de La Pequeña Habana, donde diariamente recibía visitas de parientes cercanos, amigos y vecinos. Tras ingresar en el Mercy Hospital por causa de una dolencia cerebral, la trasladaron a un hospicio. Murió dormida. La actriz fue enterrada ayer viernes.
2011-03-06 14:36:38
