Buenos Aires, 26 nov (Prensa Latina) La baja en los ingresos y la incapacidad de los salarios para ajustarse a la inflación provocaron que el porcentaje de morosidad de las familias argentinas sea hoy el mayor en 15 años.
A eso se agrega que las tasas que fijan los bancos para otorgar los préstamos y abrir créditos nunca acompañaron el nivel del costo de vida, coincidieron en divulgar varios medios a partir de declaraciones del economista Christian Buteler a la emisora radial Splendid AM990.
Buteler señaló que este problema “afecta a la capacidad de pago de las familias, convirtiendo los créditos en una carga insostenible”.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) detalló el nivel de morosidad en las familias argentina, la cual alcanzó un nuevo récord en septiembre último, produciéndose el onceno incremento consecutivo en el nivel de irregularidad de los créditos.
El economista explicó que el problema no radica en el endeudamiento en sí mismo -que es común para bienes durables en economías desarrolladas- sino en la alta proporción de deuda destinada a consumo habitual, generada por desesperación ante la falta de ingresos suficientes.
Nunca las tasas de los créditos acompañaron la baja de la inflación, afirmó Buteler e ilustró que a principios de este año, con una inflación desacelerando fuertemente, las tasas de costo financiero total se ubicaban de 140 a 150 por ciento, mientras los salarios se actualizaban de 20 a 25 por ciento anual.
El experto detalló que el alza de la morosidad se produjo en un escenario donde las tasas de interés de los créditos personales se mantuvieron en niveles excesivamente altos, incluso cuando la inflación reflejaba una tendencia a la baja.
Esa disparidad, según Buteler, inevitablemente termina teniendo su impacto en la morosidad y en la capacidad de las personas para cumplir con sus obligaciones financieras.
El economista criticó la política del gobierno de liberar las tasas de interés que pesan sobre el crédito, el cual debería ser un dinamizador de la economía, y por el contrario se convierte en un «salvavidas de plomo» bajo las actuales condiciones económicas.
Por otro lado, el aumento de la tarifa eléctrica impactó más en los sectores medios, indicó el diario Página12. Esa suba se debió al recorte de subsidios y suba de tarifas lo cual golpeó el poder adquisitivo de hogares del tipo medio.
El Gobierno está cumpliendo con compromisos ante el FMI para mantener la rentabilidad en el segmento de la distribución, transporte y precios mayoristas, que hoy están dolarizados, señaló el periódico.
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