Opiniones

Efectos colaterales de la presencia del FMI en Santo Domingo: 2020-2024. Anatomía de una quiebra moral, socioeconómica y política

Por Juan Carlos Espinal. 2/3

Como sistema político inviable, la democracia representativa de pos guerra 1966-2024 surgió en medio de la crisis de legitimidad democrática en el hemiferio, se consolida a partir del nuevo orden geopolítico marcado por la expansión geográfica de la Doctrina Monroe y se sostiene en el tiempo cuando miles de inmigrantes dominicanos llegaron a las costas de Estados Unidos, Europa y América Latina, expulsados por la explotación capitalista, a consecuencia de la tercera ocupación estadounidense en República Dominicana, la fractura social, política y económica impulsada por la guerra civil y se fortalece a partir de la preservación del aparato pre industrial qué terminó con la dictadura militar de Rafael Leonidas Trujillo Molina, 1930-1961.

Desde entonces, el Departamento de Estado de Estados Unidos comenzó a oponerse a los flujos migratorios masivos, filtró las instituciones nacionales, manteniendo el curso del Golpe de estado al presidente Bosch, 1963.

Sobre esta base, desde 1966, cada 4 años, el establecimiento oligarca legítima el consenso sociopolítico y económico impuesto por los bancos occidentales.

El Gobierno del presidente Luis Abinader 2024-2028, es hoy para República Dominicana representante de clase de la minoría del consenso ideológico y político en el país que culturalmente propone abiertamente una agenda internacional basada en el desconocimiento del Derecho Público Internacional.

Los últimos reductos de de la derecha política opositora de pos guerra defiende el modelo de la democracia occidental, adhiriendose a los programas neoliberales del Fondo Monetario Internacional de los Estados Unidos.

El pensamiento libero conservador de las élites políticas de la derecha económica gobernante y los núcleos de la burguesía de la derecha política opositora son culturalmente casi indistinguibles entre sí.

El Gobierno del presidente Abinader defiende un retorno a los valores tradicionales del injerencismo en los países de América Latina y el Caribe no alineados al consenso de Washington.

Sostiene el rechazo a las políticas del bienestar; mantiene una agenda privatizadora de las instituciones públicas, y ante todo, defiende las sanciones económicas de Washington a Venezuela, Cuba y Nicaragua u otros países afines.

El PRM es un partido político reaccionario que en Ucrania, frente a Rusia, pide en la ONU desde Europa, un retorno a los ideales de la antigua Alemania nazi, que fortalezca la expansión de los países europeos miembros de la OTAN hacia el Este.

Promueve abiertamente la política de sanciones de Estados Unidos a los productos industriales de China en el país.

Como anteriormente sucedió en las economías de pos guerra mundial en décadas anteriores.

El Gobierno del presidente Abinader también aboga por la expansión territorial del Comando Sur de Estados Unidos en Haití y el restablecimiento de las relaciones económicas y de buena vecindad con los gobiernos de extrema derecha de Argentina, Perú, Ecuador y Paraguay.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de República Dominicana apéndice del Departamento de Estado de Estados Unidos cree que con el uso de la fuerza es necesario encontrar soluciones políticas reales a los conflictos geopolíticos, atacando a otros países diciendo constantemente que en el siglo 17 Haití invadió República Dominicana, persiguiendo a los representantes de la izquierda política latinoamericana y caribeña.

En cuanto al sistema político de la democracia representativa 1966-2024, la extrema derecha del PRM quiere para la sociedad una economía inflacionaria anexionada al Tesoro de los Estados Unidos.

Al igual que el Departamento de Estado de los Estados Unidos,…