ARCHIVO: Juan Bosch y Amín Cruz.
Por: Amín Cruz
“Nadie se muere de verdad si queda en el mundo quien respete su memoria”, Juan Bosch
Hoy, al conmemorar el 115 aniversario del natalicio de Juan Emilio Bosch Gaviño, recordamos al gran líder humanista y padre de la democracia dominicana, nacido en La Vega el 30 de junio de 1909. Hijo de Ángela Gaviño Costales, puertorriqueña de ascendencia española, y José Bosch Subirats, español de origen catalán, Juan Bosch se destacó desde temprana edad por su nobleza y entrega incondicional a su patria y a la humanidad.
Bosch vivió sus primeros años en la comunidad rural de Río Verde, en La Vega, donde inició sus estudios de primaria. Completó su educación secundaria en el colegio San Sebastián de La Vega, aunque solo hasta el tercer nivel de bachillerato. En 1924, se trasladó a Santo Domingo y trabajó en varias tiendas comerciales. Posteriormente, en 1929, viajó a España, Venezuela y varias islas del Caribe, regresando a República Dominicana en 1931.
Su primer libro de cuentos, «Camino Real», se publicó en 1933, seguido por «La mujer». Bosch también fue creador y editor de la sección literaria del periódico Listín Diario, desempeñándose como crítico y ensayista. Su talento literario y compromiso con la verdad y la justicia fueron evidentes en todas sus obras.
El 30 de junio no solo celebramos el día del maestro, sino también el nacimiento de un líder inolvidable en América Latina, el profesor Juan Bosch. Su visión literaria y política, llena de buenas acciones, intenciones y valores humanistas, fue aniquilada por las ambiciones colonialistas del imperio. Desde su niñez, Bosch desempeñó un papel fundamental en la sociedad dominicana, destacándose como escritor y líder político. Su trabajo trascendió fronteras, influyendo en Puerto Rico, Cuba, Costa Rica, Venezuela y Guatemala, entre otros países.
El Profesor Bosch se forjó con un claro criterio de valores, comprometido con servir a su patria. Su extraordinaria participación política y literaria se desarrolló en diversos países de la región y Europa, sobresaliendo en todos los escenarios sociales, culturales, políticos y económicos. Toda su vida fue un ejemplo de liderazgo ético, honesto, recto, respetuoso y transparente.
Hoy, honramos un aniversario más de un hombre grande y visionario, y también el día del maestro. Tal como lo expresó el Premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez, quien declaró más de una vez que “Bosch es su profesor”. Este reconocimiento llena de orgullo a todos los dominicanos, al ver una figura de la dimensión del Gabo hablar así de un ciudadano de la patria de Duarte, Sánchez, Mella, Luperón y Caamaño.
El Profesor Juan Bosch fue un mártir de la humildad y la justicia. A pesar de sus detractores, que solo reconocen su grandeza tras su muerte, Bosch tuvo la virtud de servir desinteresadamente. Fue un líder con una visión clara en defensa de los más humildes del pueblo dominicano y del mundo. Su humildad y sacrificio por su patria son lecciones imperecederas para las generaciones futuras.
El filósofo del liderazgo Peter Koestenbaum, en su libro «Leadership: The Inner Side of Greatness», describe que el liderazgo verdadero reside en quien puede interpretar la realidad de sus seguidores y guiarlos por un sendero seguro. Bosch encarnó este ideal: serio, honesto, trabajador, humilde, sincero, capaz, inteligente y dispuesto a darlo todo por la causa.
En 1963, Bosch rompió paradigmas al ser el único presidente y líder político en América Latina que desafió la opresión, la injusticia, la tiranía, el abuso de poder y la corrupción. Su gobierno buscó justicia, libertad y transparencia, pero fue frustrado por el imperio, la oligarquía y fuerzas extranjeras. El pueblo no estuvo a la altura para entender y defender su propia vida de existencia de un gobierno honesto, que gobernaba por un mejor desarrollo sostenible con sus transformaciones de salud, vivienda, educación, escuela, trabajo… Etc.
Juan Bosch, hombre honesto y democrático, es un ejemplo eterno para las generaciones, su vida y legado nos inspiran a seguir luchando por un mundo más justo y equitativo, recordándonos que la verdadera grandeza reside en la honestidad, la nobleza y la seriedad con que uno vive su vida y sirve a su país.
El 25 de septiembre de 1963, un golpe de estado truncó el gobierno de Bosch, un hombre honesto, democrático y honrado, ejemplo para generaciones pasadas, presentes y futuras. Su legado sigue vivo como un faro de esperanza y un recordatorio de la importancia de la honestidad, la nobleza y la seriedad en la lucha por un mundo mejor.
¡Que Viva el Pensamiento del Ilustre Maestro del Siglo XX, Juan Bosch!!!
“El amor hace fuerte a los débiles y valiente a los cobardes. El amor obra milagros”, “Si no puedo ver por mí mismo la liberación de este pueblo, la veré a través de mis ideas”, Juan Bosch.