BEIJING, 21 jun (Xinhua) — La inversión extranjera directa (IED) en la parte continental de China, utilizada realmente, se situó en 412.500 millones de yuanes (57.940 millones de dólares) en los primeros cinco meses de este año, según datos del Ministerio de Comercio publicados hoy viernes.
El monto fue 28,2 por ciento menor que el del mismo período del año pasado, indicó el ministerio en su página web.
A pesar del descenso, se establecieron 21.764 nuevas compañías con inversión extranjera en toda China en el período reportado, lo que representa un incremento de 17,4 por ciento, indican los datos.
«La escala de inversión extranjera utilizada realmente mantiene un elevado nivel histórico», de acuerdo con un funcionario del ministerio, quien atribuyó la reducción principalmente a una elevada base de comparación del año pasado.
El sector manufacturero atrajo 28,4 por ciento o 117.100 millones de yuanes de la entrada total de IED, es decir, 2,8 puntos porcentuales más que el mismo período del año pasado, lo que evidencia una continua mejora en la estructura de inversión.
El ingreso de IED en la fabricación de equipos de consumo inteligentes y servicios técnicos profesionales se elevó 332,9 por ciento y 103,1 por ciento interanual, respectivamente.
La IED proveniente de Alemania y Singapur se incrementó 24,2 y 16,2 por ciento interanual, respectivamente, detalló el ministerio.
«En la actualidad, las expectativas y la confianza de los inversionistas extranjeros se mantienen estables en términos generales», dijo el funcionario, que citó los resultados de una encuesta hecha entre cámaras de comercio extranjeras, los cuales muestran que más de tres cuartas partes de todas las compañías estadounidenses, europeas y japonesas en China planean continuar sus negocios en el país.
Este año, China ha implementado diversas políticas para atraer la inversión extranjera. En marzo, el Gobierno publicó un plan de acción que propone 24 medidas, incluidas algunas para expandir el acceso al mercado, fomentar la igualdad de oportunidades y facilitar el flujo de factores de innovación.
Con la entrada en vigor de estas políticas y medidas nuevas, el entorno empresarial de China se volverá aún más favorable y los inversionistas extranjeros se percatarán de que la «próxima China» sigue siendo China, agregó el funcionario.
