Miguel Flaquer
Da lastima ver como el Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano ha degenerado en un adefesio que procura exaltar a la inmortalidad amigos por encima del mérito. Y eso es en muchísimas disciplinas deportivas, pero en ninguna se ha visto la obscenidad y la degradación del ajedrez.
No es porque Mateo lo diga, sino por que es la pura verdad, el pabellón es un grupo de analfabetos deportivos, hay no hay un solo elemento que tenga amplios conocimientos del deporte, ni uno solo. lo que es peor son gente que van a pitcharle a gente allegada y se ayudan entre ellos para esas bajezas. Usted puede o no estar de acuerdo con la trayectoria de Mateo, pero sus criticas son reales. Guzmán es un individuo sin brillo, apagado, que se tiene que llevar de otra gente hasta para votar, Marcos Jimenez, un elemento alcoholico que peleo en la Guerra de Abril del lado gringo invasor, un traidor a la Patria, matando buenos dominicanos, preguntenselo a el mismo. No sabe nada de deporte de alta competición. Y por ahi Maria se va.
Pero el mas perverso de todos es Damirón ,un resentido dedicado toda su vida al odio y al rencor, despreciado grandemente por cerca del 90% de los ajedrecistas dominicanos. Pésimo ajedrecista, se paso décadas jugando y nunca gano nada, lo que ha sido es un compilador de datos que maneja según conviene. Ha cogido el pabellón para exaltar ajedrecistas allegados, a Eneida, una mujer que apenas sabe los fundamentos, la exalto, claro, Eneida trayéndole medicinas del extranjero para atenderse sus numerosos achaques, convenció a todos sus amigos de que votaran por ella y resultaron cómplices de esa barbaridad. Este año le pitchó el juego a Eliseo González, otro desconocido en la opinión pública que nunca sacó la cabeza internacionalmente.
Es una aberración que esa gente haya puesto a Damirón de secretario general, un elemento recusado por su parcialidad hacia amistades, cuando exalto a Eneida todos los ajedrecistas se llevaron las manos a la cabeza, si fuera otro renuncia, pero perdió la verguenza, quiere dedicarle sus miserables años a evitar que Mateo y que cualquier adversario suyo sea exaltado, aunque los méritos sean sobrados. Se ha pasado la vida entera sembrando odio y eso es lo que ha recogido. Debiera recordar sus tragedias a nivel
personal, producto de ese carácter osco e intratable.
Ahora quiere ser presidente del pabellón, esperando a que el presidente gotee y además que lo exalten, una barbaridad que no dudamos que vayan a ejecutar sus amigos ahí dentro. Al calvito que dirigía el Mauricio en basket la comunidad deportiva lo desprecia porque el tiempo que estuvo como juez ahi dentro lo cogió para echarle lodo a Hector Baez y que se muriera sin exaltarse.
Lo que uno no sabia es que el pabellon manejaba tanto dinero. Salvo muy contadas y honrosas excepciones, la crónica deportiva esta completamente silenciada o autocensurada. Al pabellón desde hace años solo se le da copypaste a sus notas de prensa, y muy pocos tienen la dignidad de alzar la voz. Y que conste, uno nunca ha escuchado un periodista hablando bien del pabellón, el descredito es unánime, pero eso es en una esquina o en un cafe.
El pabellón es el retrato mas fiel de una sociedad podrida que privilegia el amiguismo por encima del mérito.
Miguel Flaquer
