El presidente de la Unión Demócrata Cristiana -UDC, Luis Acosta Moreta, Luis “El Gallo”, alertó al pueblo dominicano de que tenga mucho cuidado al digerir los informes envenenados de organismos internacionales sobre la crisis haitiana.
Destacó que tanto las Naciones Unidas, como la Organización de Estados Americanos, calumnian al país y se atrincheran en posiciones de puro corte pro-haitiano, lo cual rechazamos con todas nuestras fuerzas.
Añadió que la última versión falsa y calumniosa fue la emitida por un grupo de expertos de la ONU, donde indicaron que parte de las armas que tienen los pandilleros haitianos, fueron enviadas desde la República Dominicana.
Respaldó la posición del presidente Luis Abinader que rechazó el informe-acusación de las Naciones Unidas, y lo calificó de falso.
El presidente Abinader y las Fuerzas Armadas dominicanas están firmes y verticales en el control fronterizo, y exigir que se pare la construcción ilegal del dique en el río Masacre, y nosotros los apoyamos.
Con una gran irresponsabilidad, sin señalar las fuentes que tienen de que los dominicanos les envíen armas a los haitianos, esos organismos hacen una acusación tremebunda, insensata y peligrosa.
La crisis interna de Haití fue creada por las grandes potencias, incluyendo a las Naciones Unidas que propiciaron una intervención de diez años de los Cascos Azules que fue la generadora de los problemas actuales.
Las Naciones Unidas decidieron desmantelar a la policía y al Ejército haitiano y cuando les llegó el retiro dejaron a esa nación sin organismos de seguridad.
Analistas internacionales señalan con claridad que la mayoría de los efectivos del ejército haitiano que fueron despedidos se reorganizaron en pandillas, que son los grupos para-militares que llevan la intranquilidad a ese país.
Una muestra es el caso del temible Jimmy Charizier, Barbicue, que fue comandante de la Policía haitiana y ahora aglutina a todas las pandillas bajo un mando único en la G-9 y Familia, siendo uno de los responsables de la anarquía que se vive del otro lado de la frontera.
