El 25 de septiembre de 1963, los líderes de la oligarquía dominicana que pretendían un régimen antidemocrático sin Trujillo, con las practicas trujillistas, con el apoyo de una parte del Gobierno de Estados Unidos del presidente Jhon F Kennedy, interrumpieron el Gobierno constitucional del presidente Juan Bosch. El hecho, trágico para la República Dominicana, tiene que permanecer en la memoria del pueblo dominicano como una lección que enseñó las consecuencias que origina un atentado contra la voluntad popular y que no hay fuerza humana que sea capaz de impedir la decisión de un pueblo.
Los golpistas frustraron el proyecto democrático que tenía como aspiración una sociedad sustentada en instituciones para producir las transformaciones que requería República Dominicana a partir de 1963 para afrontar la pobreza y la desigualdad social. Tras el golpe vino el desorden, la intolerancia y el saqueo de una parte del patrimonio nacional.
td=23 El profesor Juan Bosch, y el doctor Segundo Armando González Tamayo, candidatos presidencial y vicepresidencial del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) y aliados, ganaron las elecciones del 20 de diciembre de 1962, las primeras tras la caída de la dictadura de Trujillo, con 619 mil 491, el 59.83 por ciento de los votos, de un millón 54 mil 944 dominicanos y dominicanas que participaron en los comicios. Pero la madrugada del 25 de septiembre de 1963, las fuerzas antidemocráticas derrocaron el primer Gobierno democrático que escogió el pueblo luego que terminó la dictadura de Trujillo. Con ese hecho la República Dominicana sufrió el resurgir de la represión y el reparto de la Hacienda Pública.
Como consecuencia del golpe cayeron los mártires de la guerrilla de 1963. Se produjo un hecho doloroso y traumático como la «Guerra de abril de 1965», y la primera invasión militar estadounidense en el siglo XX. Fue un hecho trágico en la vida dominicana.
Es el acontecimiento más funesto que ha sufrido el país tras la caída de la dictadura de Trujillo. Tiene que constituir una lección permanente.
12826 La lucha fratricida tuvo su origen en el atentado a la democracia el 25 de septiembre de 1963. El hecho desató una nueva lucha por la democracia. La sangre derramada en abril es parte de la memoria nacional. La ocasión es propicia para honrar a los hombres y mujeres que dieron lo más preciado de la vida para restaurar el proceso democrático. Y exaltar la personalidad del presidente Juan Bosch, que trazó el camino que conduce a una sociedad que supere las estampas de la pobreza y la desigualdad social en las dimensiones que sufrió el pueblo dominicano.
En procura de su objetivo Juan Bosch aportó su talento y capacidad de trabajo al pueblo dominicano.
En el nuevo aniversario del golpe `podemos celebrar que no fue en vano la lucha del presidente constitucional Juan Bosch. El pueblo dominicano sigue adelante con la aspiración de que se fortalezcan las instituciones democráticas conforme la Constitución de la República promulgada por el presidente Leonel Fernández el 26 de enero de 2010.
La semilla sembrada por Juan Bosch ha hecho posible materializar parte de sus aspiraciones y sigue adelante en procura de un Estado que se sustente en el respeto a la dignidad de la persona como establece la Constitución de 2010.
El golpe de Estado de 1963 no pudo vencer la decisión del pueblo dominicano de luchar para vivir en democracia. Llegará el día de celebrar y vivir como establece la Constitución. Es la decisión del pueblo dominicano.
Honrar en este día a Juan Bosch y a los hombres y mujeres que lo acompañaron en 1963.
Editorial de Diariodominicano.com 25 de septiembre de 2023,