Por Héctor Tineo Nolasco
Diariodominicano.com
SANTO DOMINGO, el 15 de junio de 1844, murió de manera repentina el ciudadano Ramón Santana, quien junto a su hermano Pedro Santana, constituyeron el liderazgo de los hateros de El Seibo.
Pedro falleció 20 años después en circunstancias parecidas a la de su hermano Ramón.
Los dos apoyaron a los trinitarios en el proyecto que culminó con la proclamación de la República Dominicana, el 27 de febrero de 1844.
El historiador Rufino Martínez anota en su “Diccionario Biográfico-Histórico Dominicano, 1821-1830, que a pesar de que Pedro y Ramón Santana, eran hermanos mellizos, tenían un espíritu y carácter diferente. “Ramón Estaba hecho para la vida civil y no de cuartel”. Eran hijos de Pedro Santana y Petronila Familia.
Destaca que a pesar de esa actitud dio todo el apoyo a los próceres febreristas y figuró en el primer grupo de hateros de El Seibo, que llegaron a la Capital a luchar al lado de los próceres independentistas.
Cuando murió Ramón Santana, de manera repentina, el 15 de junio de 1844, Pedro Santana pidió a la Junta Central Gubernativa que lo relevara temporalmente de su posición militar, porque tenía que encargarse de los negocios que pertenecieron a su hermano.
Esa coyuntura fue aprovechada por los trinitarios para intensificar sus actividades en procura de tomar el control de la Junta Central Gubernativa, que controlaban los conservadores bajo la presidencia de Tomás Bobadilla.