Cultura, De Hombres, Mujeres y Cosas, Efemerides, Portada

Fallece exiliado en Puerto Rico el ex presidente dominicano Buenaventura Báez

Buenaventura Báez

Báez cinco veces presidente de República Dominicana, falleció alejado del poder y en la soledad soledad del exilio.

Por Héctor Tineo Nolasco

Diariodominicano.com

SANTO DOMINGO, el 4 de marzo de 1884, falleció en Hormiguero, Puerto Rico, el ex presidente dominicano Buenaventura Báez.

      Con su muerte desapareció uno de los  caudillos que más influyó durante los primeros 30 años de la República Dominicana.

     Del nacimiento de Buenaventura Báez,  hay versiones encontradas: el historiador Miguel Angel Monclús, en su obra “El Caudillismo en la República Dominicana”, indica que nació alrededor de 1810.

   En cambio,  los historiadores Emilio Rodríguez Demorizi, en “Papeles”, y Rufino Martínez, en “Diccionario Biográfico Histórico Dominicano”, coinciden en que nació el 20 de octubre de 1812 en Rincón, Neiba, hoy municipio de Cabral.

    Fueron sus padres Pablo Altagracia Báez, un ciudadano  de origen español y la negra esclava Teresa Méndez, quienes procrearon siete hijos.

  Buenaventura Báez era el mayor.  Los demás son Carlos, Félix, Damián, Altagracia, Irene y Rosa Báez. De padre fueron sus hermanos Valentín y José.

    El padre de Buenaventura Báez era un próspero hombre de negocio del sur. Era dueño de “cortes de madera, hatos, haciendas, tiendas, panaderías, alambiques, numerosas casas y recuas, así como miles de libras esterlinas depositadas en el Banco de Londres”.

    La versión es ofrecida por el historiador Rufino Martínez, en su obra “Santana y Báez”.

    En  1927,  Buenaventura Báez fue enviado por su familia a Francia, donde cursó estudió superiores, pero no hay detalles que indiquen si los concluyó y las disciplinas que cursó. Tampoco hay información de sí terminó con éxito la carrera que escogió.

   Cuando  retornó al país estaba en una posición privilegiada por los conocimientos adquiridos en Europa.

   En opinión del historiador Rufino Martínez, era “el más apto para las altas representaciones oficiales respaldado ello por la preferencia de su acaudalado padre”.

    En el año 1843, fue síndico de Azua; y miembro de la Asamblea Constituyente como diputado por Azua.

    En el año 1844, Báez suscribió el Manifiesto de Separación  de Haití con el apoyo de Francia.

   Buenaventura Báez fue cinco veces Presidente de la República Dominicana y se encontraba exiliado en Puerto Rico, desde que su último Gobierno fue derrocado por un movimiento que lideró  el sacerdote Fernando Arturo de Meriño.

   A partir del año 1853, cuando fue reemplazado en la Presidencia por el general Pedro Santana, rompieron relaciones con lo que se inició una rivalidad que sólo terminaría cuando murió el primero,  el 15 de julio de 1864.

    La primera administración del Gobierno del Presidente Báez fue del año 1853; la segunda 1856-1858; la tercera 1865-1866, en la cuarta administración desarrolló el Gobierno de los seis años durante el período 1868-1874.

    El último Gobierno de Buenaventura Báez fue durante el período 1878-1878, cuando se vio obligado a renunciar a la Presidencia de la República.

     En la ocasión, Ignacio María González,  fue uno de los militares de la guerrilla que apoyó el Partido Azul, bajo el liderazgo del sacerdote Fernando Arturo de Meriño,  para derrocar al Presidente Báez que había tomado posesión el 27 de febrero de 1876.

   Buenaventura Báez al no resistir el Movimiento en su contra, renunció y salió al exilio el 2 de marzo de 1878. Durante su administración persiguió a los dirigentes de los verdes y de los azules.

    Antes de salir del poder,  obligó a comerciantes de la ciudad de Santo Domingo, a pagar por adelantado los gravámenes de Aduanas y recaudó RD$70 mil pesos, lo que sumó a otros RD$300 mil pesos que había acumulado durante su administración, reteniendo los dineros correspondientes a los empleados públicos y los militares que se encontraban en campaña.

     Fue el último Gobierno de Buenaventura Báez, quien viajó a Curazao y luego a Puerto Rico, donde murió el 4 de marzo de 1884, alejado del poder y en soledad.