La Reforma Migratoria
Por Hector J. Peniche
NEW JERSEY.- unos de los dramas sociales más difícil está atado al fenómeno migratorio de los latinos en los Estados Unidos. Todos los estudios sociales realizados en este país recogen el drama de mas de 11.1 millones de indocumentados que esperan que la reforma migratoria ponga fin a su condición de inmigrantes ilegales.
Lo más difícil de todo es que la propuesta a la reforma migratoria, aun patrocinada por el propio presidente George W. Bush, ha encontrado la mayor oposición dentro de los legisladores de su propio partido. Los republicanos en el Congreso, quienes abiertamente han desafiado al presidente Bush, han decidido realizar audiencias, por ahora por lo menos, más de veinte, pero no han podido complacer al presidente antes de las vacaciones congresuales del mes de agosto.
En las primeras audiencias la Cámara Baja, aprobó la ley HB4437, patrocinada por el republicano James Sensenbrenner, la cual propuso criminalizar a los indocumentados y a todos los que les asistan incluyendo a familiares y empleadores. Sin embargo, estas audiencias, son una prueba de que el liderazgo en la Cámara Baja no refleja ninguna intención para ponerse de acuerdo y apoyar al presidente Bush con una Reforma integral que permita la legalización de millones de indocumentados mayormente latinos o hispanos.
En este sentido, la sociedad norteamericana parece estar dividida, si conviene una legalización masiva, contrariamente a la posición del presidente Bush, por lo que ya se han formado movimientos como el Minuteman, compuesto por activistas que consideran a los indocumentados como una amenaza a la sociedad norteamericana. La misma posición del presidente norteamericano, es contradictoria, pues, mientras por un lado propone la Reforma integral de migración, por otro lado ha presionado a los empresarios que empleen a los inmigrantes ilegales. Esta situación pone en tela de juicio la sinceridad del presidente y los demás políticos sobre el resultado de la Reforma, precisamente, en estos momentos de campaña política con mira a las elecciones congresuales de noviembre próximo.
El espíritu antiemigrante es cada vez mas evidente y pronunciado, pues, los estados y las ciudades por cuenta propia, ya han aprobado propuestas muchas de ellas contraria a la constitución federal, para que a los inmigrantes indocumentados no se le facilite trabajo y aun peor multaran a los propietarios de viviendas que le alquilen casas o apartamentos a los indocumentados. Mientras los legisladores estén de vacaciones las audiencias sobre el tema migratorio están suspendidas. Pero el debate sobre inmigración podría aumentar la participación de los votantes hispanos o latinos en las elecciones de noviembre, siendo la Reforma migratoria el problema más importante.
Por primera vez, así lo reflejan estudios, la Reforma migratoria se sitúa como la primera preocupación de los votantes hispanos. Por ello, han surgido reacciones encontradas, entre aquellos que consideran que el tema migratorio esta siendo usado únicamente como tema de campana política como forma de atraer votantes hispanos, independientemente si la Reforma migratoria lo va o no a beneficiar. Por primera vez los votantes hispanos están unidos por una causa común: la Reforma migratoria.
Hector J. Peniche es un periodista y abogado residente en el Estado de New Jersey.
2006-08-09 13:51:17