LOS TEMAS DE TELEDEBATE
¡CUANTA DEMAGOGIA! Mientras patronos y trabajadores no han podido arribar a acuerdo sobre el reclamo de aumento salarial, el senador reformista Adriano Sánchez Roa se apea con la propuesta de que acogerà y convertirà en proyecto de ley un incremento general de salarios del 50 porciento tanto para el sector pùblico como privado. El planteamiento puede lucir muy atractivo pero resulta totalmente irreal. En primer lugar, cabrìa pregunta de dònde va a sacar el gobierno los fondos necesarios para un aumento de esa naturaleza. ¿Acaso de una nueva reforma fiscal? Esto aparte de que las finanzas pùblicas estàn en buena medida intervenidas por el Fondo Monetario Internacional. Y en cuanto al sector privado, pretender sobrecargar màs a las empresas, sobre todo medianas y pequeñas, con un costo de esa naturaleza, màs ahora que enfrentaràn la competencia extranjera en el marco del Tratado de Libre Comercio, serìa tanto como llevar a la quiebra a la mitad de ellas u obligarlas a despedir parte de su personal, elevando asì la tasa de desempleo. Lo menos que puede decirse de tan absurdo planteamiento es que resulta demagógico, populista, oportunista y totalmente irresponsable y recomendarle a su promovente que de mejores notaciones de sensatez y buen juicio, como se supone debe corresponder a un senador de la Repùblica.
SALARIO NOMINAL Y SALARIO REAL. Y hablando de reajuste salarial, Vìctor Bautista en el ùltimo nùmero del semanario Clave, publica una reflexión que no tiene desperdicio. Bautista dice con toda razón que lo importante no es aumentar el salario sino el valor adquisitivo del mismo. De cuando el salario mínimo era de sesenta pesos a nuestros dìas, ha caìdo un diluvio. Pero ocurre que con ese salario mínimo se soportaba el costo de la vida mucho mejor que con el salario mínimo de ahora. Ahora tenemos muchos màs pesos pero con mucho menos valor. La razón es que cada vez que se incrementan salarios, el costo de la vida sube automáticamente y en ocasiones anticipadamente a un mayor nivel que el reajuste. Al final de cuentas usted dispone de màs pesos…pero vive peor. Lo importante es trabajar por apreciar el valor del peso. Esto es lo que constituye el salario real y lo que permite en verdad mejorar la calidad de vida. Todo lo otro es allante, ficción e inflación.
DE BAJA CALIFICACIÓN. La evaluación llevada a cabo por el experto español en temas de orientación y procesos cognitivos, Josè Dìaz Estévez, sobre una muestra de siete mil 928 estudiantes de bachillerato que intentaron ingresar a las universidades, no pudo haber arrojado resultados màs decepcionantes. La calificación fue de apenas 41 puntos sobre un total de 100. Segùn el análisis, el nivel de conocimientos y capacidad para realizar procesos mentales superiores de la gran mayorìa de los bachilleres que ingresan a los estudios universitarios, resulta muy deficiente. Estos resultados de Dìaz Estévez no nos descubren una situaciòn nueva en nuestro todavìa muy penoso marco docente. Simplemente confirman una vez màs lo que se ha venido admitiendo desde hace mucho por algunos de los propios rectores universitarios, entre èstos el de la UASD sobre la pobreza de conocimientos y capacidad de entendimiento de la mayor parte de los bachilleres que tocan a sus puertas, muchos de los cuales presentan un nivel hasta de apenas octavo curso. El consenso coincide en confirmar tambièn como causas fundamentales la carencia de un buen trabajo magisterial en la formaciòn de la habilidad de los estudiantes para formular procesos mentales correctos y la deficiente enseñanza que se recibe en los niveles básico y medio. Es tambièn el criterio de doña Ligia Amada Melo, Secretaria de Estado de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, educadora de muchos años de experiencia
MENORES DELINCUENTES. Lo ocurrido el pasado domingo en el vistoso y concurrido desfile de carnaval es otra señal màs de hasta dònde la pequeña delincuencia, esa que se dedica a aprovecharse de cualquier descuido para robarse un celular, una cartera o hasta una gorra, ha ido proliferando y la necesidad de prestarle atención. Asì como hay que ponerle caso al microtràfico barrial de drogas, es tambièn necesario dedicarle la mayor atención a estos pequeños actos de raterìa que sin estremecer el ànimo de la ciudadanìa como ocurre con los grandes crímenes, va minando igualmente la bases de la seguridad colectiva. Pero el aspecto màs preocupante de lo ocurrido el domingo es que los noventa y nueve detenidos por la Policìa Nacional por actos de raterìa son todos menores de edad. Adolescentes y niños tempranamente sumergidos en el submundo de la delincuencia. El hecho es para preocuparnos doblemente.
ACOSO SEXUAL. Motiva a vergüenza e indignación la revelaciòn del hoy teniente general Bernardo Santana Pàez de que seis años atràs, noventa y seis mujeres bachilleres que integrarìan la Policìa Científica se dieron de baja ante el acoso sexual de que fueron vìctimas por parte de oficiales de la uniformada. Cabe preguntar si se establecieron responsabilidades en ese momento, se adoptaron sanciones y se dieron de baja a los responsables. Porque lo màs penoso serìa que esos mismos elementos continúen en la institución como si nada hubiese pasado. De ser asì, son capaces de atreverse a volver a las andas con el nuevo batallòn de mujeres que han sido incorporadas ahora al cuerpo con la misma finalidad que sus infortunadas antecesoras.
INCENDIO FORESTAL. Desde el pasado sábado un incendio forestal ha venido consumiendo una gran extensiòn de pinos adultos y jóvenes en el Parque sierra de Bahoruco. Incendios forestales ocurren en todas partes del mundo, en ocasiones en la temporada de seca, debido al intenso calor, y en otras por descuido humano: una colilla encendida arrojada entre los arbustos, pequeños fuegos hechos por la mano del hombre que luego se extienden y producen grandes daños. Pero en este caso se produce una situaciòn muy singular. Ocurre que una vez que se iniciò el fuego se diò la alerta a la oficina de Foresta de Pedernales dándole la circunstancia insòlita de que la misma carece de vehículo y de logística y dispone de una radio que no funciona por falta de una batería. El comentario se lo dejamos a los amigos televidentes, mientras las llamas siguen arrasando los pinos y la ùnica esperanza al parecer de controlar el fuego viene de lo alto. Que la Altagracia se conduela y haga que se abran las nubes para que la lluvia controle el siniestro.
2007-03-09 15:23:12