EL TIRO RAPIDO
de
Mario Rivadulla.
Lo menos que puede decirse de la investigaciòn y cuestionamiento en torno a la nacionalidad de la activista de origen haitiano Sonia Pierre, es que resulta totalmente inoportuno. En gran medida tambièn, contraproducente.
Con el paìs enfrentando el reto de una fuerte, bien orquestada y financiada campaña de descrédito internacional por parte de algunas ONGs que reciben fuertes subsidios del extranjero, tratando de presentarnos como paìs esclavista en un pròximo evento a celebrarse en Parìs, este caso viene a resultar un elemento de distracción y dispersión de coincidencias, esfuerzos y voluntades de lo que debe ser un gran frente nacional.
¿Què prioridad reviste querer demostrar ahora mismo que Sonia Pierre haya sido inscripta como dominicana por su padre utilizando una cèdula falsa, cuando hay muchos otros casos similares no solo de haitianos y otros extranjeros sino hasta de peligrosos delincuentes internacionales?
Pero aùn en el caso de que realmente fuese asì, lo que lógicamente resultarìa un hecho totalmente ajeno a la responsabilidad de la señora Pierre, y que pòr razones estrictamente legales, un tribunal decidiese anular su acta de nacimiento…¿què impedirìa que ella llenase todos los requisitos para acceder a la naturalización despuès de cuarenta y cuatro años residiendo en el paìs? Màs aùn… ¿què gobierno incurrirìa en el gravísimo error de negàrsela?
Desde hace 3 dìas, el caso de Sonia Pierre no solo se ha convertido en noticia de portada y resultado tema principal de comentarios en los medios radiales y televisivos, despertando toda una oleada de reacciones emotivas, por lo general a su favor, sino que ha arropado la cuestión nodal a que estamos abocados: enfrentar vigorosamente el infame y pérfido montaje que se pretende en la capital francesa.
No sòlo ha distraído la atención que debièramos tener focalizada en ese gran compromiso de naciòn. Ha contribuìdo tambièn a dispersar fuerzas y a que medios de comunicación que coinciden en la necesidad de ir en defensa de la imagen exterior del paìs gravemente amenazada y se han pronunciado vigorosamente en ese sentido, salgan en defensa de Sonia Pierre y expresen, con sobrada razón, que esta acciòn totalmente extemporánea y oportuna, pudiera interpretarse como un acto de retaliaciòn y debilitar nuestra causa.
Esta tiene sobrados elementos de defensa. No es necesario repetirlos una vez màs. Por nuestra parte los hemos señalado en muchísimas ocasiones. Pero es preciso airearlos en forma organizada, siguiendo un plan y una estrategia inteligentes. Fijar nuestra posiciòn con argumentos convincentes, sobrada de razones y despojada de pasiones. Formar un frente inexpugnable y vigoroso, dejando bien en claro que si no somos àngeles, mucho menos los demonios como se nos quiere presentar.
Todo lo que contribuya a desviar la atención y el esfuerzo orientados en esa direcciòn resulta inapropiado e improcedente. Y el caso de Sonia Pierre cae dentro de esta clasificaciòn, que como bien se ha advertido, pudiera convertirse en un boomerang que debilite en vez de fortalecer nuestra posición frente al enemigo comùn y en el tema principal que debe ocuparnos.
2007-04-04 14:37:13
