EL TIRO RAPIDO
de
Mario Rivadulla
Ya en ocasiones anteriores nos hemos referido a la forma en que de manera un tanto alegre y muy a menudo irresponsable, se acostumbra a lanzar denuncias al voleo, en forma generalizada y sin aportar ningún tipo de elemento de prueba que las sustente.
Tal ocurriò en semanas recientes con la hecha por el Secretario de Estado de Medio Ambiente y Recursos Naturales, cuando acusò a un grupo de legisladores de todos los partidos de estar promoviendo la modificación a la Ley de Areas Protegidas para ponerla en manos de particulares.
Aùn cuando asegurò que avalarìa su denuncia con “pelos y señales”, lo cierto es que salvo en el caso del senador Rubén Cruz, màs conocido como Toyota, todavìa estamos esperando los nombres de los congresistas que estarìan involucrados en el supuesto intento. Màs bien, lo que hizo el titular de Medio Ambiente fue pedir excusas al ser interpelado por el Senado.
El Presidente de la Càmara de Diputados ha incurrido en la misma falta, no una sino dos veces. Primero al denunciar la contaminación de dineros del narcotráfico en las actividades polìticas, y màs recientemente al mencionar la alegada participaciòn de militares de alto rango en el robo de cables de teléfonos y electricidad. Tanto en uno como en otro caso, el denunciante tampoco aportò pruebas de sus denuncias.
Pero tambièn el sector privado se apela a esa pràctica irresponsable. En dìas recientes, Ivàn Garcìa hablando a nombre de una de las varias federaciones de comerciantes que existen en el paìs, acusò a la Comisión para las Importaciones Agropecuarias de conceder permisos en forma medalaganaria a favor de un grupo reducido de empresas. Tampoco en este caso se aportò la menor prueba en apoyo de la denuncia.
Esta en cambio acaba de ser vigorosamente desmentida en un comunicado a pàgina completa, que firman veinte de las màs reconocidas y representativas asociaciones de comerciantes de todo el paìs.
Muy al contrario de lo expresado por el denunciante, en este comunicado el comercio nacional organizado reivindica y avala la gestiòn de la referida Comisión, que califica de transparente y a la que brinda todo su respaldo.
De acuerdo al pronunciamiento, la referida Comisiòn ha dado participaciòn equitativa a todos los sectores vinculados a la producciòn y comercializaciòn de productos de consumo masivo. Y agrega que de esa forma se ha logrado conjugar el déficit que se registra en determinados perìodos del año, en artículos que integran la canasta familiar y que son de elevado consumo.
Saludable en este caso que hayan sido las propias instituciones del sector comercio, màs que los propios integrantes de la Comisión como parte agraviada, las que hayan asumido la responsabilidad de desmentir la acusación que se les hizo. Y conveniente tambièn que den fe de que la misma està trabajando con la necesaria transparencia, en un àrea tan sensible donde lamentablemente, en no pocas ocasiones, se han registrado operaciones punto menos que dolosas.
Queda ahora al denunciante como ùnica alternativa: o tratar de probar su aparentemente temraria acusación o proceder a una obligada y justa rectificación. Esto asì aunque sea a base de apelar al abusado expediente de que donde dicen que dije Diego, digo que dije digo.
Y por lo demàs, exhortar a quienes denuncian sin pruebas, funcionarios, políticos o particulares, de la naturaleza y procedencia que sean, a que descontinúen una pràctica irresponsable que ya por reiterada, fatiga, pierde credibilidad y produce rechazo en la opinión pùblica y a la que es preciso ponerle tèrmino de una vez y por todas.
2007-07-18 17:25:40
