Miguel Vargas: incumplidor y violador de la ley.
Por Bienvenido Segura
La grandeza de los seres humanos en su paso por la vida no esta determinada solo por sus grandes obras o importantes hazañas, sino también por las pequeñas cosas que hacen o dejan de hacer.
La fortaleza del hombre no se define por la gravedad de su voz, lo tosco de su rostro o el grado de brusquedad con que reaccione ante un estimulo proveniente de su entorno o exterior.
La persona que mas habla no es la que mas sabe. En otras palabras, hablar mucho no significa obligatoriamente tener mucha capacidad o abundantes conocimientos.
La seriedad de un hombre no se sustenta tan solo en la reciedumbre de su palabra.
Resaltar de manera reiterativa una condición o cualidad personal no implica necesariamente que sea cierta la característica que se atribuye.
No hacer lo que manda la ley es irrespetar a la sociedad y a sus instituciones. Es ignorar y ser indiferente a la razón o motivo que conlleva al legislador a crear un determinado texto legal.
El hombre que no cumple lo que establece la ley se convierte en incumplidor y violador de la misma.
Estas reflexiones surgen porque últimamente he observado con atención que el aspirante a dirigir los destinos del país en la boleta electoral del PRD no pierde oportunidad para llamar o calificar de incumplidor al Presidente Leonel Fernández.
Pero revisando su desempeño en la administración publica me detuve a evaluar sus ejecutorias o resultados y llegué a la conclusión que el incumplidor y violador de la ley y de sus compromisos con la nación es el propio Miguel Vargas Maldonado.
Al candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano durante la última gestión de gobierno dirigida por su organización política le correspondió ejercer las delicadas e importantes funciones de Secretario de Estado de Obras Publicas y Comunicaciones.
A pesar de ser una institución cuyas ejecutorias tienen una cobertura nacional el flamante ministro de SEOPEC de la época nunca se motivó a visitar el interior del país para constatar las necesidades de comunicaciones viales que tenían determinadas ciudades o pueblos ubicados lejos de la capital.
Al plantearse el acceso de la Republica Dominicana a los mercados internacionales de capitales y colocarse los mal recordados Bonos Soberanos, el Congreso Nacional dominado con una absoluta mayoría por el PRD convierten en ley dos proyectos que establecían los mecanismos y sus formas de aplicación, y especificaban al propio tiempo los pueblos y provincias donde serian invertidos los recursos financieros producto de esa negociación.
Curiosamente en esa época, el hoy Presidente del Partido Revolucionario Dominicano Ramón Alburquerque y el actual Coordinador del Sector Agropecuario de esa organización política Andrés Bautista eran quienes dirigían el Senado de la Republica cuando dichas leyes fueron aprobadas.
Promulgadas y dadas a conocer por Hipólito Mejia algunos días después, las leyes 128-01 y 1-03 crearon grandes expectativas en los territorios a ser beneficiados.
Ahí se incluyeron varias obras de infraestructura que serian construidas por la Secretaria de Estado de Obras Publicas y Comunicaciones, que como expresé mas arriba su “gerente” lo era el actual candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano.
En pocas palabras, la Ley de Bonos Soberanos del 2001 ordeno al MVP en su condición de “Súper Ministro” de SEOPEC en el gobierno del PPH construir una inmensa cantidad de obras entre las cuales se pueden citar autopistas, carreteras, caminos vecinales, calles, aceras, casas, contenes, malecones, y otras tantas en cada una de las provincias que señala la misma ley.
Lógicamente el aspirante presidencial del “partido que no da gobierno” no ejecutó el mandato de ese texto legal y “dejó esperando” a los que hoy estamos pagando esa deuda con nuestros tributos al Estado.
Miguel Vargas fue indiferente y violó esa ley de bonos soberanos, irrespetando al Congreso Nacional, al Poder Ejecutivo y al pueblo dominicano que creyó en su palabra cuando juró cumplir las leyes y reglamentos al asumir el cargo que desempeñó en el gobierno de su jefe político el Agrónomo Hipólito Mejia.
Con el irrespeto a esa ley se mofó o burló de los dominicanos y dominicanas, contribuyendo por consiguiente a debilitar y socavar la institucionalidad por la que hoy postula.
El que se hace llamar MVP incumplió la ley, y ahora cabe pedirle que explique al País y a la sociedad nacional porqué no construyó las obras que le autorizó esa normativa y qué hizo con los millones de pesos que su gobierno le asignó a SEOPEC para esos fines.
Si el aspirante presidencial de PRD desconoció la Ley de Bonos Soberanos lo mismo podría hacer con la Constitución de la Republica y con otras leyes en caso de que por un “chepazo de la historia” logre alcanzar el poder en las elecciones del año que viene.
Por esa razón afirmo de manera categórica que Miguel Vargas es incumplidor y violador de la ley, y por lo tanto no merece ser Presidente de la Republica Dominicana.
2007-08-23 14:16:21
