Opiniones

Cultura portátil

Cultura portátil

POR LEO HERNANDEZ

El profesor Lipe Collado con frecuencia me ha comentado su convicción de que los dominicanos tenemos una cultura portátil, que la llevamos por doquier y a la que estamos abrazados para siempre.



Lipe ha jugado rol esencial en la formación de más de una generación de periodistas, en lo didáctico, en las propias aulas, en el reporterismo y en el gremialismo, que se resiste a abandonar.



Con orgullo es de los que ha narrado -ausente de estridencias, exhibicionismos y aguajes- episodios importantes de la revolución constitucionalista del 65, siendo de los primeros periodistas dominicanos, si no el primero, que cruzó la cortina de hierro(que sí era de hierro de verdad) en aquellos duros tiempos de los 12 años, Además de periodista, es casi abogado y ahora –como yo- tambien casi agricultor, después de ser tratadista del tiguere dominicano. Por estos, entre otros factores, merecidamente obtuvo hace algunos años el Primer Premio Nacional de Periodismo.



Hablo de Lipe porque estando hace poco en Washington, DC, confirmé su premisa sobre la cultura portátil, compartiendo con unos cuantos compatriotas que residen en la capital norteamericana, pero solamente viven allí, porque –en realidad- están aquí, en su país.



Buscan comer las cosas que son tradicionales en el lar nativo, acuden a sitios de diversión y entretenimiento donde lo que se escucha y baila es bachata y merengue, los que han emigrado desde el Cibao siguen arrastrando la i mientras los del Sur entonan sus expresiones con el “cantaíto” que les caracteriza.



Basta con que contacten a uno de los suyos para que arranque el “análisis” político sobre el presente y futuro de su Patria, y si citan algún punto de la geografía dominicana vienen los recuerdos y sentimientos que a veces alcanzan hasta las lágrimas.



En pocas palabras, el dominicano traslada consigo donde quiera que va, como su propio equipaje, sus costumbres, tradicionales, pesares, voluntades y anhelos.



Y bien cierto es lo que afirma Lipe: Tenemos una cultura portátil, a la que no abandonamos.



El autor es periodista y consultor de comunicación

leohernandez@indes.org

2007-10-04 13:08:25