Opiniones

EL TIRO RAPIDO

EL TIRO RAPIDO



de



Mario Rivadulla

Hoy no se celebrò el mercado binacional que se realiza cada lunes y viernes en la ciudad fronteriza de Dajabòn.  El ayuntamiento,  con el apoyo de los comerciantes locales,  dispuso la paralizaciòn del mismo en solidaridad con organizaciones que protestan por la veda impuesta a la entrada al paìs vecino de huevos, pollos, sopitas y salame criollos.

Es otro episodio en la tensa situaciòn originada por la disposiciòn de las autoridades haitianas que ha ocasionado pèrdidas a los granjeros agrìcolas de este lado de la isla, estimadas en màs de 55 millones de pesos hasta el momento presente. 

Autoridades de ambos paìses mientras tanto, continùan dialogando y negociando una salida a la crisis que tambièn lesiona el interès de pequeños y medianos negocios haitianos,  impedidos de comercializar esos productos que tienen una gran demanda entre los consumidores,  los que a su vez dejan manifestar su disgusto al verse privados de los mismos.

Aparte de que Puerto Rico, donde rigen las estrictas normas sanitarias prevalecientes en los Estados Unidos mucho màs rigurosas que las puedan existir en Haitì, levantò la veda de inmediato, cuenta el hecho de que en el paìs residen cientos de miles de haitianos, quizàs llegando al millòn y medio, que al igual que los dominicanos han seguido consumiendo pollos y huevos producidos aquì sin el menor trastorno de salud. 

Pareceria que un argumento de esta naturaleza seria lo bastante convincente y poderoso para que las autoridades vecinas levantasen la prohibiciòn.  No obstante, por lo que se ha divulgado, pese a que sus propios tècnicos han estado verificando la situaciòn en las granjas productoras, insisten en que un especialista de la Organizaciòn Internacional de Salud Animal certifique la no existencia de gripe aviar.  La presencia de èste ha sido requerida,  y es de esperar que una vez que emita su dictamen se allane el camino para solucionar la crisis.

Sin embargo, una de las voces màs calificadas para opinar sobre este tema y todo lo relacionado con la frontera, es sin dudas la del padre Regino Martìnez por su largo y activo servicio en la regiòn y las muchas experiencias acumuladas durante su ministerio, que ha sido tanto de carácter social como espiritual.

A juicio del religioso, segùn su testimonio que recoge el Diario Libre en su ediciòn de hoy, el problema surgido con los pollos y los huevos dominicanos no es de orden econòmico sino polìtico. 

El padre Regino afirma que los haitianos prefieren los productos dominicanos porque, en sus propias palabras, son màs frescos y de mejor calidad.  Ello explica el intenso comercio que se produce dos veces a la semana en Dajabòn, a cuyo mercado acuden entre 8 y 10 mil haitianos y aùn màs,  a realizar sus compras cada lunes y viernes.

Su pronòstico categòrico es que si no se busca una salida a la crisis avìcola, se registrarà una avalancha de compradores haitianos desafiando la prohibiciòn, con todas las posibles desagradables consecuencias que esta situaciòn pudiera traer.    

Frente a esta situaciòn, el padre Regino entiende que de no prosperar las negociaciones que en estos momentos estàn llevando a cabo las autoridades de ambos paìses, la ùnica alternativa es una reuniòn de alto nivel entre los presidentes Leonel Fernàndez y Renè Garcìa Prèval.

Creemos que la propuesta es vàlida. Sobre todo porque de por medio juegan aspectos que trascienden el solo interès de proteger a nuestros productores de huevos y pollos.

En el orden econòmico, un comercio que en los ùltimos cinco años, entre las exportaciones nacionales y las de zonas francas, le han reportado al paìs una balanza comercial favorable cercana a los mil millones de dòlares, pese al intenso contrabando.  Y en el orden polìtico, por la obligada convivencia geogràfica que nos impone la necesidad racional de practicar una relaciòn de respetuosa y buena vecindad, en beneficio de ambas partes.

Dejemos pues, de lado, toda reacciòn de xenofobia, aplaquemos prejuicios y resabios que exaltan peligrosamente los ànimos y obstaculizan el anàlisis ponderado y procedamos con la debida prudencia y paciencia para manejar esta situaciòn como impone el buen juicio y no la ciega irracionalidad.

2008-02-05 17:27:07