EL TIRO RÁPIDO



de

Mario Rivadulla

El Presidente de la Junta Central Electoral, Julio Cèsar Castaños Guzmàn se ha mostrado muy activo en estos dias en emitir opiniones y ofrecer informaciones a la poblaciòn de aspectos importantes relacionados con el proceso comicial que monta el organismo y tendrà su culminaciòn el pròximo 16 de Mayo.

De entre sus focalizaciones màs recientes, destaca una que aunque es reiterativa merece se le ponga mayor interès.  Se trata de la necesidad de establecer controles efectivos sobre el origen y destino de los recursos de fuente particular que reciben los diferentes partidos y candidatos para financiar sus respectivas campañas.

Ya en otras oportunidades anteriores hemos abogado porque sea dejada sin efecto la ley que dispone la entrega a las diferentes agrupaciones polìtica legalmente registradas, de un porcentaje de los fondos que recauda el Estado, el cual se duplica en los años de elecciones.  En el presente, se ha informado que el aporte estatal està en el orden de unos mil doscientos millones de pesos, de los cuales el 75 porciento, por partes iguales, va a las arcas del PLD, el PRD y el PRSC.

La derogaciòn de dicha ley procede,  en tanto la justificaciòn que se enarbolò para darle vida, fue la de garantizar la independencia econòmica de los partidos polìticos.  Que èstos no tuvieran que tocar a las puertas de empresarios y aportantes privados para financiar sus actividades proselitistas, en el entendido de que al hacerlo estaban en buena medida contrayendo compromisos, implìcitos y en muchos casos expresos, que incidirìan posteriormente en sus actuaciones. 

En la pràctica no ha ocurrido asì.  En vez de ello, partidos y candidatos siguen acudiendo a la ayuda particular y recibiendo soporte de èsta cada vez con mayor largueza. De ahì, las multimillonarias sumas que se invierten de manera creciente en las campañas polìticas y que rebasan con mucho el aporte estatal.  Que se deje sin efecto esa ley y los partidos polìticos accedan a renunciar a ese pròdigo aporte estatal, resulta ilusorio. Imposible, màs que simplemente improbable.

Frente a esa realidad, cobra màs fuerza el planteamiento del Presidente de la Junta porque se pueda ejercer un control efectivo sobre la procedencia y el monto de los cuantiosos aportes privados  para garantizar que esos fondos no estàn contaminados de ilegalidad.  Que no se trate de recursos provenientes de actividades irregulares o delictivas, principalmente del narcotràfico.

Es preocupaciòn màs que vàlida.  Una posibilidad muy cierta, que ha tenido lugar en otras latitudes y que no serìa de extrañar se registrase aquì por razones sobradamente obvias que estàn a la vista y son de conocimiento generalizado.   Bastarìa para alimentar ese temor, el hecho de que nos hemos convertido en importante corredor de los carteles de la droga para suplir el mercado internacional en cantidades cada vez màs apreciables.

Ya anteriormente el Cardenal Lòpez Rodrìguez habìa hechos advertencias en este sentido. 



Otras voces se han levantado para coincidir con la misma preocupaciòn.  Y por nuestra parte, no hay que enfatizar que tal ha sido un tema muy recurrente en nuestro Teledebate y el Tiro Ràpido.

En otros paìses tambièn los polìticos reciben financiamiento de procedencia externa. Pero existen regulaciones estableciendo lìmites al monto de dichos aportes asì como la identidad de los aportantes, lo que permite rastrear el origen de los mismos.

Lamentablemente aquì, tal como tambièn reconoce el Presidente de la Central Electoral, el organismo no dispone de los mecanismos necesarios que le permitan ejercer ese saludable control.   Es preciso por consiguiente, crear el marco jurìdico adecuado y facilitarle los medios requeridos para ejercer una efectiva auditorìa del origen y cuantìa de los fondos de campaña recibidos por esa vìa y el destino que se les da.

Un control de esta naturaleza contribuirìa a elevar de manera significativa la sanidad el ejercicio polìtico en el pais,por lo que es de esperar que dentro del esquema de modernidad en que se le quiere insertar, se den pasos diligentes y efectivos en esa direcciòn.  Confiemos que asì ocurra.

2008-03-10 14:05:18