Opiniones

EL TIRO RÁPIDO

EL TIRO RÁPIDO



Jueves 31, 2008

Como era de esperarse la participación de Hipólito Mejìa en el tradicional almuerzo semanal del Grupo de Comunicación Corripio resultó polémica, interesante y reveladora.  El ex mandatario acudió al encuentro con los periodistas junto a un nutrido séquito de colaboradores, incluyendo varios destacados funcionarios que lo acompañaron durante su gestión de gobierno.

En la comparecencia menudearon las críticas  a la actual administración del Presidente Leonel Fernández por parte de Mejìa y varios de sus acompañantes.  Estas se focalizaron entre otras, en el sector eléctrico, donde el ex administrador de la Corporación Dominicana de Electricidad, César Sánchez, dijo que no se ha instalado una sola planta durante la actual gestión para aumentar la generación energética.  En el área de salud, Jesús Félix Iglesias le reprocha al actual incumbente falta de voluntad política para una aplicación eficaz del Seguro Familiar de Salud.  En otro orden, el economista Arturo Martínez Moya, al igual que Jaime Aristy Escuder, pone en duda las medidas de austeridad anunciadas en su último discurso por el presidente Leonel Fernández,  y a pesar de las promesas del mandatario y de los miembros de su gabinete económico de que no se contempla una nueva reforma fiscal, considera que ésta será inevitable.

Pero al margen del previsible rosario de críticas al gobierno, destacan tres aspectos fundamentales planteados por el controversial y locuaz ex mandatario. El primero de ellos se refiere a la posibilidad de que pueda presentarse nuevamente como candidato a la presidencia en las elecciones generales del año 2012. 



Evadiendo una respuesta categórica al respecto, Mejìa expresó que esa posibilidad dependerá de la coyuntura en un momento determinado. Esta tendrá tanto un componente legal como político.

En este sentido se barajan dos opciones desde el punto de vista constitucional.  Una la interpretación que se le dé a la reelección tal como esta expresada en la Constitución vigente, donde se establece la oportunidad de optar por un segundo periodo presidencial sin poderse presentar nuevamente de por vida como candidato a esa posición pero sin especificar si dicho impedimento resulta vigente aún en el caso de que, como ocurrió con Mejìa, no hubiese podido alcanzar la victoria.  La otra opción, seria una modificación en la nueva Constitución que se discutirá a partir del proyecto que enviará el Poder Ejecutivo a conocimiento y decisión de la asamblea revisora, que le permita presentarse nuevamente como candidato.

El segundo tema de importancia fue la afirmación de Mejia de que en el seno del PRD existen “caciquitos” calificándolos de inodoros, incoloros e insípidos.  Consecuente con su trayectoria de luchador advirtió que está decidido a participar en los procesos internos del mismo y que no se quedará cruzado de brazos frente a quienes pretendan enfrentarlo.

Tanto su potencial aspiración a presentarse nuevamente como candidato a la primera magistratura para lo cual se ha mantenido en continua actividad y en activo su equipo más cercano de colaboradores, como la confirmación de las distintas aspiraciones y corrientes que se mueven a lo interno del PRD, constituyen noticias sabidas y que no motivan al menor asomo de asombro a analistas y comentaristas políticos.

El aspecto de mayor significación y posiblemente más conflictivo en el seno del PRD, es su reiterada disposición, puesta de manifiesto con mayor amplitud en esta ocasión, de proponer un diálogo nacional de todos los sectores políticos y de la sociedad civil, a fin de elaborar un plan de nación que plantee soluciones a los principales problemas económicos y sociales que afectan al país.

Es una postura que contradice y enfrenta la corriente mas extremista en el seno del PRD , encabezada por su presidente, el ex senador Ramón Alburquerque, y compartida por su pasado candidato presidencial Miguel Vargas Maldonado de declararle guerra abierta sin cuartel al actual gobierno.  Y aún cuando Mejia dijo que se someterá en este caso a la decisión que tome su partido, está más allá de toda duda que su postura contará con el aval de la indudable fuerza y peso especifico que tienen sus opiniones en el seno del partido blanco.

Sin dudas el planteamiento del ex mandatario en esta dirección abre una amplia y alentadora posibilidad de promover el diálogo y la necesaria concertación de todos los sectores del país políticos, económicos y sociales para enfrentar la actual crisis, tal como recomienda el más elemental sentido de responsabilidad y sensatez.

2008-08-01 14:31:56