Opiniones

Preservemos la Joya de la Corona (PLD)

Preservemos la Joya de la Corona (PLD)



           (Riesgos Implícitos Cambios del 16)



                              Por Pedro Caba

*Dos Lecturas a la Reincorporación de Danilo al CP

*Nuevos Bríos “Intelectualidad del Amargue” y Periodismo Corporativo

Más nerviosa que una guinea, la dirección alta e intermedia del partido oficial espera los cambios del 16 de este mes, en la seguridad de que los mismos le marquen el camino a seguir dentro de la organización.

Dos tendencias de pensamiento parecen orientar a la dirigencia morada. La primera, referida a los clanes familiares que ocupan los principales cargos gubernamentales y partidarios de que, dada su influencia, no se les puede extrañar de tajadas importantes del pastel.

Y la segunda, la de que la inconsecuencia que ha marcado las dos administraciones peledeístas para con el resto de la dirigencia que no tiene la cobertura de los clanes familiares, deberá cesar para darle paso a una acción más justiciera y distributiva de parte del Ejecutivo.

Pero eso es sólo a lo interno.

Porque a lo externo del partido oficial, están los grupos de apoyo que en búsqueda de prebendas, aunque fundados en un innegable atractivo por el liderazgo de Leonel, magnifican sus aportes electorales para ambicionar y creerse merecedores de puestos públicos de envergadura.

Al acecho se encuentra un periodismo corporativo marcado por los intereses de grupos empresarios que, como consecuencia natural, se ha refundido con lo que llamamos la “intelectualidad del amargue”, aquella que desde los centros académicos y cómodas asesorías a empresas y grupos de poder cultiva la crítica a Leonel y las falencias del orden institucional y económico-social actual. Para ellos, el PRD es mejor opción, con todo y su inhabilidad para elaborar y ejecutar un proyecto-país y la corruptela que le acompaña.

Coro con éstos dos últimos sectores mencionados, forman también los trujillistas y neotrujillistas que jamás aceptarán que ninguna generación posterior al Jefe pueda conducir la Nación a mejores destinos.

Tanto los de dentro del partido como los de fuera, sin embargo, parten del convencimiento de que Leonel se ha “enseñoreado” sobre la colectividad política actual y resume tal capacidad de poder, delegada por el pueblo mismo, que sólo en él se deposita la autoridad suficiente para disponer del presente y, probablemente, del futuro dominicano.

— Dos Lecturas a la Reincorporación de Danilo al CP

Por fuerza, hay que ligar la reincorporación de Danilo Medina al Comité Político del PLD con las declaraciones de advertencia que emitieron Temistocles Montás, Reynaldo Pared y Pina Toribio acerca de la necesidad de restablecer las relaciones partido-gobierno.

Para una parte, Danilo se incorpora como instrumento de presión que se agrega a las expectativas de los clanes de preservar posiciones de poder dentro del gobierno, por haber sido él su principal propulsor.

Pero para otra parte, Danilo se preserva así mismo en la organización donde considera que tiene algún futuro, con el convencimiento de que se hacía riesgoso para su futuro inmediato mantener la lejanía. O sea, se sometió a la realidad de que el líder indiscutible seguirá adelante de todas maneras, y más vale que ante esa realidad se le tome en cuenta.

Sin embargo, Danilo debe saber que ha decepcionado a buena parte de los opositores a Leonel y a sus reformas, que se esperanzaron en que Danilo se instituyera en freno para la toma de decisiones del Ejecutivo que profundizaran actuales cursos de acción. Lo querían fuera de la estructura partidaria y amenaza latente para encabezar un proyecto opositor de amplio espectro.

—Nuevos Bríos Intelectualidad del Amargue y Periodismo Corporativo

La fusión se estaba gestando desde hace tiempo, pues ambos sectores tienen un objetivo común: demeritar toda acción que lleve a cabo Leonel y el PLD.

Se trata del periodismo corporativo, el que se ha puesto al servicio de los grupos económicos, para desde la dirección de sus medios emprender una acción de permanente crítica y debilitamiento del gobierno, con la “intelectualidad del amargue”, una mezcolanza de académicos, cientistas sociales e intelectuales que desde pretendidas posiciones de izquierda o liberales, la mayoría de historial perredeísta, son severos críticos de Leonel desde los planos ideológico y político.

Esta “intelectualidad del amargue” se la califica de esa manera, porque su hobby es reunirse en tertulias, cenas o cualquier encuentro familiar a las que han incorporado al periodismo corporativo para quejarse de los atrasos de nuestra sociedad, las distintas expresiones de la corrupción pública (poco reparan en la privada) y de la derechización a que, según ellos, ha llevado Leonel al PLD, pues además de cultor del balaguerismo, dicen, es protector de los grupos de poder más atrasados de la sociedad.

Es la doblez elevada a la máxima potencia, porque tanto el periodismo corporativo como la intelectualidad del amargue se nutre y han sido llevados a sitiales de la clase media alta desde estamentos como medios de comunicación, academias, fundaciones de estudios económicos y sociales gracias a los jugosos emolumentos de los grupos de poder, en la mayoría de los casos, o al paso de las administraciones perredeístas por el gobierno.

Esa intelectualidad del amargue parece no darse cuenta que con esa práctica, que cultiva la desesperanza y la frustración a la vez, están cayendo en el resentimiento generalizado, engendro natural de las bajas pasiones.

Ambos sectores se frotan las manos, porque saben la disyuntiva en que se encuentra Leonel, y cualquiera que sea la vía de acción del Presidente a partir del 16 de este mes, los predispone a sacar provecho con la crítica negativa.

 

—Los Riesgos que están implícitos con los Cambios del 16

No se puede negar, por tanto, que Leonel debe obrar con fino tacto, y con el conocimiento de cada uno de sus conmilitones antes de mover las fichas, tanto en el plano local como en el extranjero.

Y como ha dejado pasar la transición sin grandes movimientos en el tablero, nadie conoce a plenitud sus intenciones.

Si de algo sirve la observación desde fuera del escenario partidario, lo que debe estar claro en estos momentos es que la posesión de la “joya de la corona”, el PLD, debe preservarse a toda costa, tomando en cuenta que es el seguro de vida de la continuidad del proceso de reforma y modernización del Estado y de la sociedad dominicana. Proceso éste que requiere de compromisarios, para su fiel ejecución y continuidad.

Leonel es garantía de todos los grupos y subgrupos que militan en el PLD, aún de quienes lo adversaron y acudieron a malas artes, coincidentes con la oposición, en la lucha por la candidatura. Pero es también la esperanza de muchos peledeístas que se consideran relegados por la acción monopólica de puestos de quienes pretendieron alzarse con el liderazgo del partido.

Los movimientos de apoyo ya tienen posiciones tomadas en la administración pública, y no debe pretender a mucho más que eso. Un beneficio adicional, es que la mayoría de los reformistas no necesitan administrar recursos públicos y deberán estar disponibles para el servicio exterior.

El cuatrienio que se inicia el 16 está lleno de grandes augurios: es el de definitivo asentamiento de la seguridad social, del inicio y expansión del Metro y del transporte colectivo organizado de pasajeros en el Gran Santo Domingo y en Santiago, donde se concentra casi el 50% de la población; del relanzamiento de las zonas francas y mayor expansión del turismo, que parece no tener frontera visible; el del cambio definitivo de la matriz energética tanto para generación eléctrica como para el transporte masivo de carga y pasajeros (tren Haina-Santiago) y el de la consolidación del sistema tributario, reduciendo la evasión a niveles de sociedades organizadas y garantizando al Estado recursos para sustentar sus planes y proyectos.

Lo que viene después del 16 de agosto, no obstante el actual entorno crítico en el plano económico, en términos de realizaciones, es verdaderamente auspicioso, lo que facilita en gran medida la toma de decisiones políticas.

3 de agosto 2008

2008-08-05 16:50:11