Opiniones

El PRD: Su Imagen y sus Liderazgos Internos

El PRD: Su Imagen y sus Liderazgos Internos

Uno de los aspectos más difíciles con lo que tiene que lidiar toda organización  política  es el relativo al cambio de método y de visión, que en ocasiones deben introducirse con miras a lograr  mayor efectividad en las actuaciones de sus miembros y dirigentes en el escenario político y electoral.  Cualquier institución que amerite  cambios internos, si no los pone en practica no consigue el crecimiento deseado que facilite  el logro de los objetivos que se ha propuesto con miras a la obtención del poder.

El primer paso para introducir los cambios que necesita una organización política es concientizar a sus miembros y dirigentes de la necesidad de los mismos, ya que sin ellos no hay posibilidad de avanzar y crecer. Cuando los miembros y dirigentes de una organización política toman consciencia de que sólo un cambio de actitud, tanto en el comportamiento como en la visión  que se debe asumir para modificar y fortalecer métodos de trabajo, sólo ello es una garantía para  fortalecer los intereses colectivos e institucionales, que son los que en definitiva nos darán el crecimiento y la pujanza que como organización política estamos proyectando de cara al poder.

La proyección de una imagen de poder ante los ojos de la sociedad sólo es posible cuando estemos conscientes de que la armonía y la unidad en las actuaciones de los miembros y dirigentes  del PRD debe ser el compromiso diario de los diferentes sectores sociales que tienen fe en que este partido sabrá interpretar la coyuntura política de crisis moral y económica que vive el país y en la que la  sociedad lo ha colocado en un lugar protagónico, dependerá de esta organización,  como colectivo, si tiene la inteligencia para aprovechar al máximo la responsabilidad que el pueblo ha puesto en sus manos como principal partido de oposición.

La percepción de una nueva imagen a favor del PRD se traduce en suma y apoyo de nuevos miembros y de la sociedad a esta organización. La suma de voluntades a favor de los cambios que enarbola esta organización con miras a alcanzar el gobierno, es una garantía para que la sociedad dominicana perciba el cambio de actitud y la nueva imagen que el PRD esta llamado a proyectar como condición necesaria para ampliar el apoyo que le facilite su crecimiento y su paso a controlar el poder político del país.

En este aspecto debemos decir que el PRD en los últimos años se ha manejado respetando el criterio de la mayoría de sus miembros y dirigentes  cuando ha tenido que elegir a sus  representantes a posiciones municipales, congresuales como a la presidencia de la Republica. En las consultas y elecciones internas que ha llevado a cabo esta organización sus miembros han decidido quienes dirigen al partido o quienes van al Congreso y a los Ayuntamientos a representarlo. Todo este comportamiento, que ha respetado la democracia interna, ha mejorado sustancialmente el crecimiento del PRD tanto en el aspecto cuantitativo como en el aspecto institucional y ha mejorado, de forma significativa, la imagen que debe proyectar ante los ojos de la gente.

Ahora bien, cuál es la debilidad que ha venido arrastrando la imagen del PRD de cara a la sociedad? La parte que el PRD tiene que mejorar y fortalecer  es la que tiene que ver con el comportamiento de algunos liderazgos internos, que entienden que su “principalía dirigencial”, producto de su participación en gobiernos pasados, les garantiza “una participación exitosa”  en las convenciones y elecciones  internas, perdiendo de vista que el criterio que debe prevalecer es que los dirigentes que deben ser elegidos son aquellos que tienen base y apoyo social en sus comunidades.

Cuando “se elige” a un candidato por su incidencia económica, pero que no tiene ese mismo apoyo en los núcleos medios ni en a base de esta organización, esa elección en el futuro se revierte en contra del PRD, porque cuando se va a una elecciones de cara  la sociedad en general, es evidente que en esa situación cuando se cuentan las posiciones  ganadas en los ayuntamientos y el Congreso el PRD sale perjudicado.



Por esta razón el PRD debe actuar con la inteligencia y madurez suficiente para llevar en su boleta  a los puestos congresuales  municipales a dirigentes que garanticen el triunfo en sus respectivas comunidades.



Esta es una condición necesaria para fortalecer su imagen favorable ante los ojos de la sociedad y  avanzar en la conquista del poder.

El PRD tiene, tanto en sus dirigentes tradicionales como en los nuevos, la posibilidad de combinar la experiencia con el dinamismo y la creatividad  que sintetizan miles de nuevos miembros que están ingresando a sus filas para fortalecer su crecimiento y su desempeño electoral. Unos y otros deben estar conscientes de que sólo un discurso político  a favor de la mayoría  y una actitud política que ponga en evidencia el desprendimiento de sus miembros para actuar a favor de la institucionalidad garantiza su crecimiento. El PRD  y sus dirigencia deben estar conscientes de que sólo unidos en torno a un proyecto de nación  se lograra desempeñar,  de forma exitosa, el rol de fuerza política principal de oposición, que le otorgó el pueblo en las pasadas elecciones.

Sólo la unidad de propósito a lo interno del PRD y la unidad de criterio en torno a reformas  constitucionales, económicas, políticas, electorales, entre otras, garantizan un avance político exitoso de cara a los meses y años por venir, sin perder de vista que esta organización debe enviar, para consulta, a sus dirigencias medias y de base las grandes decisiones a tomar y debe acogerse a las decisiones que trace esa mayoría partidaria.

Tanto los dirigentes tradicionales como los nuevos  deben crear consciencia de que unos y otros son necesarios para fortalecer las tareas políticas que permitan no sólo competir con el partido en el gobierno, si no también que deben tener la madurez suficiente para entender que estamos viviendo una crisis económica y moral profunda como sociedad  y que en esta coyuntura política el PRD debe erigirse  en el partido que interpreta las aspiraciones y ansias de bienestar que se anidan en los sectores pobres, medios e indigentes del país.

El comportamiento de los dirigentes nuevos y tradicionales del PRD nunca deberán perder de vista que todos los dirigentes tienen los mismos derechos a aspirar a una posición electiva, sin embargo nunca se debe olvidar que el gobierno al no tener posibilidad de crecer en el apoyo de la población; debido a la perdida de credibilidad a que lo conduce la crisis,  en estas circunstancias éste no desperdiciara ninguna oportunidad para tratar de descalificar por un lado y aupar por el otro a aquellos  precandidatos del PRD que por cualquier circunstancia sean mas vulnerables de cara a venideros procesos electorales, por eso las reformas que se introducirán a la Constitución de la Republica , aunque en las mismas se aprobara que un candidato pueda concurrir a diferentes elecciones como candidatos a la presidencia de la Republica de forma indefinida, ello no debe ser motivo para que el PRD olvide que ese es el primer paso del actual gobierno para tratar de seguir al frente del Estado y segundo será el primer paso para aupar candidaturas a lo interno del PRD, que por razones naturales y lógicas no son tan fuertes y viables para poder competir con éxito y vencer al actual gobierno en un próximo proceso electoral.

Por eso sólo la actuación política consciente y meditada  de su dirigencia garantiza  el avance necesario para convertirse en una verdadera opción de poder de cara al futuro en el menor tiempo posible.

Evelio Arroyo es Sociólogo, Abogado y Escritor

2008-08-15 00:34:42