Opiniones

ALBA, alternativa urgente

ALBA, alternativa urgente



ALBERTO NÚÑEZ BETANCOURT




alberto.enb@granma.cip.cu




La incorporación de Honduras en las próximas horas a la Alternativa Bolivariana para las Américas, ALBA, viene a corroborar cuán imprescindible es el camino de la integración verdadera que entre sí deben emprender las naciones latinoamericanas y caribeñas para aspirar al desarrollo.



El programa cubano Yo, sí puedo reporta millones de beneficiarios.



El hermano país centroamericano se convertirá en el miembro pleno número seis de este bloque liberador, basado en la justicia y solidaridad de los pueblos de la región.



Han transcurrido casi siete años desde aquel diciembre del 2001 en que durante la III Cumbre de la Asociación de Estados del Caribe, efectuada en Isla Margarita, se escuchó la propuesta del Presidente venezolano Hugo Chávez de desechar de una vez los modelos neoliberales, explotadores por naturaleza, y apoyar una alternativa en beneficio de nuestros pueblos, que elimine las desigualdades sociales y fomente la calidad de vida a partir de una efectiva participación de los ciudadanos.



Desde entonces mucho se ha hecho, aunque siempre parezca insuficiente. El ALBA reporta cifras millonarias de latinoamericanos alfabetizados gracias al programa cubano Yo, sí puedo, así como asistidos médicamente hasta en las comunidades más apartadas, y en particular mediante la Operación Milagro, que ha devuelto la visión a un sinnúmero de seres humanos.



También conoce de decenas de miles de jóvenes formándose como galenos en la Escuela Latinoamericana de Medicina de La Habana (proyecto nacido antes, al igual que el Programa Integral de Salud desarrollado por Cuba) y en otros puntos del continente; y de iniciativas al estilo de PETROCARIBE, acuerdo de cooperación energética con el fin de resolver las asimetrías de los estados en el acceso a los preciados combustibles.



De inestimable importancia son la creación del Banco de Desarrollo del Sur y de la televisora Telesur, esta última como instrumento alternativo al servicio de la difusión y defensa de nuestras realidades e identidad cultural.



Entre los principios y bases cardinales del ALBA, regidos por el respeto a la independencia y soberanía de cada nación, sin condicionamiento político alguno, se cuentan el propósito de alcanzar un desarrollo justo y sustentable, trabajar por la complementariedad económica y no la competencia entre países, el avance de las comunicaciones y del transporte, la protección del medio ambiente unida al uso racional de los recursos, y el fomento de las inversiones de capitales latinoamericanos por encima de los foráneos, que como regla conllevan al chantaje y la dominación, al beneficiar a los grandes empresarios y a las transnacionales.



Es el ALBA una alternativa concreta de razón social y no mercantil en favor de nuestra América frente a la gran farsa que representan el neoliberalismo y los Tratados de Libre Comercio promovidos por el imperio, que solo han traído más pobreza y exclusión a los latinoamericanos.



La Alternativa Bolivariana para las Américas, que hoy se consolida, resulta urgente para los pueblos de esta región del planeta, donde se hace más notable la disparidad entre ricos y pobres. Empeño emancipador que representa una contribución medular a la unidad latinoamericana en tanto sigue los ideales y sueños de Bolívar, Martí y otros muchos próceres de «ver formar en América la más grande nación del mundo, menos por su extensión y riqueza que por su libertad y gloria».

2008-08-25 19:46:00