Opiniones, Portada

SONDEO Luis y Leonel: los polos del 24 (¿)

Por LUIS ENCARNACION PIMENTEL

A dos años para las elecciones nacionales del 2024, las cosas apuntan a que la lucha y las posibilidades estarían centradas para ese evento en las figuras del presidente Luis Abinader y del tres veces gobernante Leonel Fernández, al margen de cualquier otro intento o vano afán, del color partidario que sea, que salga al terreno a promoverse. La política de nutre de realidades y la verdad es que, en la presente coyuntura, desde muy temprano solo Leonel y Luis – por el crecimiento, peso especifico y experiencia de Estado, el primero; y por el manejo inicial de la pandemia y la crisis económica que heredó, y por las ventajas que le ofrece el ser gobierno, el segundo- tendrían posibilidades de salir airosos o conseguir el premio gordo en las urnas.

Para el lado que se incline la balanza finalmente, va a depender, en el caso de Leonel, de los apoyos que siga ganando en el camino su proyecto presidencial, con la Fuerza del Pueblo y el grupo de partidos que anunció pasarían a respaldarle próximamente. En el caso de Abinader- que no ha hecho mal gobierno, pero tiene de frente la realidad de que siempre las demandas y las expectativas del pueblo son mayores que las posibilidades -, el que saque cuerpos de ventaja suficientes para repetir va a depender, en mucho, de que logre torear el desgaste y los disgustos generados, muchas veces por incomprensión y otras por mezquindades de opositores para los que siempre todo lo verán mal.

Pero también su éxito en el 24 va a estar muy supeditado a lo que pueda avanzar y concluir el Ministerio Público con los múltiples casos de uso indebido de recursos públicos de parte de funcionarios y allegados a la persona y gobierno de Danilo Medina. Si en esto último fiscales, procuradores y jueces no apuran el paso (y ahorita viene la campaña electoral y cualquier esfuerzo serio por dar un ejemplo y moralizar la gestión pública pudiera ser contaminado con una simple excusa de que habría “retaliación política”), el presidente Abinader no vería cristalizar su compromiso de campaña y aspiración manifiesta de perseguir la corrupción y poner fin a la impunidad.

 Por esto, debe hilar fino y medir bien Luis, porque de eventuales compromisos incumplidos, de cosas no resueltas y de pifias del gobierno o de funcionarios – algunos cambiables – que aparecieren en el camino, el único beneficiario seria Leonel, pues lo capitalizaría ampliando posicionamiento que hoy proyecta.

 No así el PLD, porque además de no tener candidato y de la estampida que sufre a diario, los cuestionamientos a la gestión pasada y los escándalos pendientes de sanción judicial lo descalifican para competir, al punto de, sino sacarle de juego, por lo menos de ponerle lejos la posibilidad de ser opción porque encante al votante (¿). Y ni decir de otros partidos pequeños, muy menguados por los traspiés. Por demás, el triunfo y el éxito de todo proyecto presidencial dependerán siempre de muchos factores y circunstancias, que no llegan solos ni caen del cielo, sino que hay que ayudarlos y buscarlos con un trabajo constante y con estrategias políticas correctas y certeras. De esto, como diría el finado sacerdote Avelino Fernández, cubano-dominicano, “de esto, seguiremos hablando”. encar-medios@hotmail.com  

 

Luis Encarnacion Pimentelencar-medios@hotmail.com