Deportes, Economia

Con la participación de militares imponen a Trujillo con violencia

Por Héctor Tineo Nolasco

Diariodominicano.com

SANTO DOMINGO, el 15 de mayo de 1930, la Alianza Nacional Progresista formalizó su retiro del proceso electoral por considerar que en República Dominicana, no hay garantías para ejercer el voto libremente. El mismo día, su candidato a la Presidencia, Federico Velásquez y a vicepresidente,  el líder Partido horacista  Ángel Morales, renunciaron a sus candidaturas.

Miembros del Ejército Nacional llevaron a cabo una campaña de represión para intimidar a los adversarios de Trujillo y de esa manera crearle el ambiente para que llegara al poder sin la participación de la oposición. Trujillo había sido el Jefe del Ejército Nacional.  Renunció a su cargo de Jefe del Ejército Nacional, para ser candidato presidencial.

El  15 de mayo de 1930, la Alianza Nacional Progresista formalizó su retiro del proceso electoral  por considerar que en  República Dominicana,  no hay garantías para ejercer el voto libremente. Su candidato  a la  Presidencia   era  Federico Velásquez y a vicepresidente el  líder horacista Ángel Morales.

    Por la  situación de violencia desatada en las últimas semanas de la campaña electoral de 1930, los miembros de la Junta Central Electoral renunciaron a sus funciones el 7 de Mayo de 1930. Fueron sustituidos por personas que simpatizaban con la candidatura de Trujillo.

   El 16 de Mayo de 1930, las elecciones se llevaron a cabo con la sola participación del binomio Rafael Leónidas Trujillo Molina-Rafael Estrella Ureña.

Fueron declarados ganadores de los comicios con un 45 por ciento de los votantes  inscritos.

    En República Dominicana, se produjeron múltiples protestas y la Alianza Nacional Progresista calificó de fraudulento el proceso, pero la Junta Central Electoral declaró ganadores a Trujillo y a Rafael Estrella Ureña, en virtud de una resolución dada a conocer el  24 de mayo de 1930.

    Trujillo y  Estrella Ureña eran aliados desde que se unieron en una conspiración que terminó con el derrocamiento del Presidente Horacio Vásquez, quien los consideraba hombres de su confianza.

   El  23 de Febrero de 1930, Rafael Estrella Ureña y sus partidarios, secundados por Desiderio Arias  y Elías Brache, antiguos dirigentes del jimenismo, dieron inicio al plan para acabar con el Gobierno de Horacio Vásquez.

Joaquín Balaguer afirma en su libro Memorias de Un Cortesano de la Era de Trujillo, que fue él la persona que hizo el trabajo de redactor del Manifiesto que dieron a conocer  los golpistas.

De esa manera se crearían las condiciones para que Trujillo llegara al poder  y comenzara su régimen dictatorial de 1930 al 30 de mayo de 1961,  cuando fue muerto.