Mario Rivadulla
Lunes 2,03,09
El discurso del Presidente Leonel Fernández el pasado 27 de Febrero ante la Asamblea Nacional, originó las reacciones que eran predecibles. Para los funcionarios gubernamentales, que con nutridos y sostenidos aplausos lo interrumpieron en numerosas oportunidades, fue una pieza magistral de oratoria cargada de mensajes de esperanza para los dominicanos. En cambio, para sus opositores, fue una especie de volver sobre lo mismo y de apelar a promesas, que aseguran, luego no se cumplirán. Desde una óptica más objetiva, las reacciones a ambos lados de la frontera que divide a unos y otros lucen contaminadas de extrema parcialidad cuando no de franco fanatismo. Obvio también que en la obligada síntesis de un Tiro Rápido, resulta materialmente imposible analizar la profundidad requerida el contenido de la intervención presidencial.
Contuvo el discurso, sin embargo, algunos anuncios importantes que vale la pena resaltar Aún cuando los críticos más sistemáticos del gobierno los califican de ilusorios, contemplados desde otro ángulo menos apasionado, son más que simples promesas políticas en compromisos solemnes de Estado que están asumiendo el Presidente Fernández y su gobierno, a partir de los acuerdos de la recién finalizada primera etapa de la Cumbre convocada por el propio mandatario.
En el amplio rosario de anuncios que matizaron el largo discurso presidencial y sin ánimo excluyente, vale destacar los siguientes:
Los estimados de inversión extranjera, crecimiento económico, control de inflación y estabilidad macroeconómica.
Los cuatro mil noventa millones de pesos que engrosarán el presupuesto de Educación para el presente año, dando así un paso de avance hacia la meta de alcanzar el cuatro por ciento del Producto Interno Bruto para impulsar y modernizar la docencia en su sentido más amplio; las nuevas instalaciones educativas y la terminación de la Ciudad Cultural de La Vega.
Las medidas destinadas a vigorizar la producción agropecuaria a fin de garantizar la Seguridad Alimentaria. En particular, resaltan mayor cantidad de recursos para ese fin, el aprovechamiento de las tierras ociosas del CEA, la conclusión de los trabajos del Merca-Santo Domingo y la creación del Seguro Agropecuario que contribuirá a facilitar los créditos a este importante sector.
La ampliación y reparación de la red vial nacional y la construcción de puentes y acueductos, así como el segundo metro y el tren Haina-Santiago con capital privado concesionado.
Los parques industriales para albergar y dar facilidades de desarrollo a las Promypime.
El programa de titulación de tierras, que sirva de firme garantía jurídica al legítimo disfrute de la propiedad.
El de emergencia para en coordinación con el sector empleador evitar despidos laborales, que bajo las actuales condiciones de crisis financiera mundial y en particular de los Estados Unidos, constituye a nuestro juicio la mayor prioridad de carácter social.
Y como es natural, el tema tan controversial de la Seguridad Ciudadana y la penetración por parte del narcotráfico y el crimen organizado en las filas de los cuerpos armados y la Policía Nacional, la necesidad de profundizar su depuración, mejorar sustancialmente su equipamiento así como la calidad del reclutamiento, entrenamiento y retribución a sus miembros.
Son muchos otros los temas que abarcó la extensa exposición del mandatario cronometrada en 2 horas y 14 minutos. Buena parte de ellos seguramente de tanta importancia como los que hemos mencionado. Pero el espacio no da para más. En cuanto al cumplimiento de las medidas anunciadas por el Presidente, que sus seguidores dan por sentado y sus opositores por incumplidas quedan referidas a la prueba inexorable del tiempo, las circunstancias y la voluntad política que se ponga para convertirlas en realidad. A ésta corresponderá el veredicto final, sobre el que consideramos preferible y prudente no adelantar ningún pronóstico aunque con el firme deseo de que lleguen a concretarse para bien del país.
TEMA DE DEBATE
El discurso del Presidente Leonel Fernández. Lo considera:
Realista?
Excesivamente optimista?
Con posibilidades ciertas de que pueda cumplir las medidas anunciadas?
Ilusorio?
Demagógico?
Una forma de ganar tiempo?
2009-03-03 15:48:22
