Por John Castillo
¿Se mantendrá el entusiasmo por las Grandes Ligas?
Indudablemente, que los dominicanos hemos pasado una gran vergüenza, luego de la mala, pírrica, triste, bochornosa, lamentable e insolente actuación del equipo criollo en el Clásico Mundial de Béisbol, que a mi modo de ver, tuvo su origen en la irresponsabilidad de muchos de nuestros jugadores de ligas mayores.
La próxima temporada del béisbol de Grandes Ligas, la cual inicia el domingo 5 de abril, con los. enfrentamientos de Dodgers Vs. San Francisco y Atlanta Vs. Philadelphia, se proyecta como muy interesante para los dominicanos. Ahora bien, ¿Se mantendrá el entusiasmo del pueblo dominicano para seguir con atención las actuaciones de nuestros jugadores?
Con 21 cuadrangulares, Hanley Ramírez estará llegando a la redonda cifra de 100, David Ortiz con tan sólo enviar 11 pelotas Pá Fuera, estará llegando a 300 en su carrera, y con 31 carreras impulsadas, estará llegando a 1000. José Reyes solo necesita 10 bases robadas más para llegar a 300 en su carrera, José Guillen necesita 14 palos de vuelta completa para la redonda marca de 200 y solo 30 impulsadas para las 800, mientras Alberto Pujols con solo 23 carreras impulsadas llegará a 1000.
También, Willy Taveras podría llegar a 200 robos de por vida, y Miguel Tejada, con 29 cuadrangulares, llegaría a 300, y así otros hijos de Quisqueya, estarán tras redondear estadísticas en materia ofensivos y de pitcheo. Como observamos, se acerca una temporada de expectativa, pero es un momento de dolor y resentimiento por una herida enorme que abrió a cada dominicano amante del béisbol el último resultado del equipo nacional en el Clásico.
Ojala que el pueblo dominicano pueda y quiera disfrutar el béisbol de Grandes Ligas en la temporada del 2009. A fin de cuentas, este es un pueblo que vive y respira béisbol hasta por los poros a cada instante, por lo que la derrota del Clásico debe quedar tras y talvez en una próxima ocasión se podría mostrar que de los errores se aprende. Entiendo que a muchos de nuestros jugadores que participan en las ligas mayores, deben recibir clases de patriotismo y hablarle detenidamente de Juan Pablo Duarte y otros tantos patriotas que dejaron sus vidas por las de otros, se le debe decir e incluso, que no hay que arriesgar la vida, sino ser responsable en su juego, solo eso.
Aunque a los diferentes espacios radiales y televisivos, muchos escuchas de esos espacios han manifestado que no estarán siguiendo tanto como antes las Grandes Ligas, creo posible de que a partir de algún momento la temporada concitará interés. Quizás por que el tiempo permita que las heridas cicatricen, por la necesidad de entretención, o bien, por el gran amor hacia nuestro deporte preferido. Desayunamos, almorzamos, cenamos y soñamos con el béisbol. Junto con el arroz, las habichuelas y la carne, es nuestro plato tradicional. ¡Olvidemos un poco las penas y que viva el béisbol!
2009-03-31 16:37:13
