LUNES 20,07,09.
EL RANCHO ARDIENDO
Mario Rivadulla
El Presidente Leonel Fernández ha regresado al país después de su periplo de diez días por el casi siempre convulso Medio Oriente y a su llegada se encuentra el rancho ardiendo, para decirlo en lenguaje popular.
Tres problemas ocupan los lugares de alta prioridad en la agenda inmediata.
Uno es el de los apagones. Nada hay que afecte más todas las actividades productivas y comerciales del país como las interrupciones del servicio eléctrico precisamente en momentos en que la tarifa energética ha sido aumentada, ni que origine un mayor estado de descontento popular que en ocasiones, llega a bordear la insurgencia en barrios y comunidades. Esto así, a veces con resultados trágicos como los registrados en días recientes en la barriada de Capotillo, por donde dio inicio auspicioso el Plan de Seguridad Democrática, con la muerte del niño de apenas trece años Miguel Angel, que ha estremecido en sus más íntimas fibras la sensibilidad popular.
Otro es la corrupción. Ciertamente está siendo aprovechado por la oposición que lo ha convertido en arma principal contra el gobierno, como es dable esperar en toda coyuntura que pueda afectar su imagen y caudal político. Al margen de esa previsible y lógica reacción oportunista, es una realidad innegable que inclusive ha sido admitida y confirmada públicamente en su torpe defensa, por quienes en las últimas semanas han sido involucrados en acciones que, en el mejor de los casos y utilizando las expresiones más amables del diccionario, califican como graves indelicadezas. De que se trata de una situación que preocupa de manera creciente a la ciudadanía, envían una clara señal los resultados de la encuesta Gallup, donde un 66.2 porciento de los consultados estiman que la corrupción está aumentando y un 83.4 considera que la impunidad hace presente en muchas ocasiones.
El tercer aspecto es el reclamo de obras prometidas, en unos casos durante la campaña electoral y en otros, anunciadas y reiteradas por los funcionarios responsables de su ejecución y que luego pasan al archivo muerto de las incumplidas, haciendo que la gente se sienta burlada y desconsiderada.
¿Qué se espera en esta situación del Presidente de la República? Le favorece el hecho de que su nombre no aparece directamente involucrado en estas situaciones, mucho menos las de carácter doloso. Pero se le reprocha y afecta su imagen, el proyectar una sensación de extrema complacencia o indolencia para adoptar las necesarias medidas correctivas.
Una de ellas, cambiar funcionarios que con sus actuaciones y los cuestionamientos a que son sometidos le hacen daño a su gestión y su persona. Quitar de en medio a elementos que en vez de aportar a su gobierno y su partido, le restan credibilidad y simpatía al primero y apoyo electoral al segundo. Si tenía alguna deuda política pendiente o relación de amistad con los mismos, ya ha sido ampliamente retribuída en un caso y más que probada su lealtad en el otro, a costo por cierto casi siempre demasiado elevado.
Otra, instruir con sentido de apremio al Procurador General de la República a que ponga en marcha las investigaciones que le corresponde realizar de oficio para tratar de detectar e instrumentar con pruebas de validez legal ante los tribunales, todos los expedientes por presuntos actos de corrupción que reposan en los archivos del antiguo DEPRECO, tal como le corresponde.
Finalmente, retomar los baños de pueblo. Acudir personalmente a cada una de las provincias para cara a cara,escuchar las quejas y reclamos de los ciudadanos, sin intermediarios que en muchos casos prefieren halagar sus oídos con informaciones interesadas y enmascaradas que transmitirle los reales motivos de disgusto de la gente. Y en ese diálogo directo, sincero y transparente, que él sabe manejar con incuestionable habilidad, prometer solo lo que pueda cumplir y posteriormente, velar porque esas promesas se cumplan.
Para hacer esa tarea esencial le quedan tres años por delante en los que tendrá la oportunidad de abandonar el poder con sus valores en alto y el camino expedito para competir nuevamente por la Presidencia en el año 2016, con las mayores posibilidades de victoria. En sus manos está el lograrlo.
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2009-07-21 14:41:01
