Editorial

Con el interés de los padres fundadores

El pueblo dominicano celebra el 170 aniversario de la República Dominicana. La madrugada del 27 de febrero de 1844, con el trabucazo del prócer Matías Ramón Mella, fue proclamada en la Puerta de la Misericordia, en la Zona Colonial de la ciudad de Santo Domingo.

El 27 de Febrero de 1844 culminó una lucha que comenzaron un grupo de jóvenes liderados por Juan Pablo Duarte el día 16 de julio de 1838, cuando fundaron la Sociedad Secreta La Trinitaria.

Juan Pablo Duarte había estudiado en Estados Unidos y Europa. Sus conocimientos los aprovechó para organizar la entidad política que fue La Trinitaria. Además de Juan Pablo Duarte, son fundadores de La Trinitaria, Juan Isidro Pérez, Pedro Alejandrino Pina, Felix María Ruíz, Benito González, Juan Nepomuceno Ravelo, Felipe Alfau, José María Serra y Jacinto de la Concha.

Se comprometieron a luchar en la clandestinidad y propagar las doctrinas separatistas y mantener siempre encendido el fuego del patriotismo. Honraron el compromiso.

El 16 de julio de 1838 comenzó una lucha, que a pesar de las dificultades y la represión del Gobierno haitiano no se detuvo hasta proclamar la República Dominicana, el 27 de febrero de 1844, con el trabucazo del prócer Mella. De esa manera nació la República Dominicana, concebida por Juan Pablo Duarte como un Estado donde tiene que imperar «plena vigencia de los derechos individuales postulados en la Declaración de los Derechos del Hombre, un Gobierno Republicano, división tripartita de los poderes públicos: Ejecutivo, Legislativo y Judicial.

Además, Garantía de la propiedad privada individual y colectiva, así como la igualdad. La Constitución de la República Dominicana consagra que todas las personas nacen libres e iguales ante la ley y son acreedoras de la misma protección y trato de las instituciones, autoridades y demás personas y gozan de los mismos derechos, libertades y oportunidades, sin ninguna discriminación por razones de género, color, edad, discapacidad, nacionalidad, vínculos familiares, lengua, religión. Opinión política o filosófica, condición social o personal.

El forjador de la nacionalidad dominicana creía en un sistema de Gobierno democrático en el que la justicia sea lo primero.

A 170 años del Trabucazo de la Puerta de la Misericordia, el pueblo dominicano quiere sean realidad los ideales duartianos.

La ocasión es propicia para honrar a los próceres de la República con el firme compromiso de mantener viva la fe en la democracia. El 170 aniversario de la Patria lo podemos celebrar con orgullo y entusiasmo porque el país vive un proceso democrático que honra a los padres fundadores. Aun cuando afrontamos el problema de un país marcado por las desigualdades socioeconómicas, avanzamos en un sistema democrático, lo que mantiene abierta la vía para lograr las reformas necesarias para crear las condiciones de que una proporción mayor de la riqueza nacional ingrese al presupuesto general del Estado, a fin de que la administración del Gobierno pueda dar satisfacción a las demandas y expectativas de los ciudadanos y ciudadanas.

En 2012 el promedio de la presión tributaria en América Latina y la subregión del Caribe fue de 20.7% y en los países participantes en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el promedio fue 34.1% al 2011. República Dominicana tuvo en 2012 una de las tres más bajas en América Latina y el Caribe, al situarse la presión tributaria en 13.5%, sólo por encima de Guatemala que recibió 12.3% del PIB durante el año.

Tenemos que aunar esfuerzos para producir las reformas que aseguren alcanzar la sociedad que concibieron los trinitarios liderados por Juan Pablo Duarte: un pueblo con educación, salud, servicios públicos eficientes con cobertura nacional. Programas sociales que cubran a la totalidad de la población que está en pobreza extrema e instrumentos que garanticen la movilidad social de las familias que están en pobreza extrema.

Celebremos que en el 170 aniversario de la República, tenemos la Constitución de 2010, que fue el producto de una amplia consulta popular y un pacto político entre el Gobierno del PLD del presidente Leonel Fernández y el presidente del opositor PRD, Miguel Vargas Maldonado. Establece que «El Estado se fundamenta en el respeto a la dignidad de la persona y se organiza para la protección real y efectiva de los derechos fundamentales que le son inherentes. La dignidad del ser humano es sagrada, innata e inviolable; su respeto y protección constituyen una responsabilidad esencial de los poderes públicos».

Es el tiempo adecuado para que los distintos sectores de la sociedad entiendan que si no logramos las reformas inaplazables será difícil, por no decir imposible, lograr un país que pueda afrontar los grandes retos que nos exhibe el presente. Tenemos que alcanzar una política tributaria que sea progresiva en lugar de una política tributaria regresiva como la que ha tenido el país.

Tenemos que seguir adelante con el interés de los padres fundadores.

2014-02-28 04:52:00