SANTIAGO DE LOS CABALLEROS, el 17 de febrero de 1925, el Ayuntamiento de Santiago, declaró a la educadora Ercilia Pepín, Hija Benemérita.
Ercilia Pepín se dedicó al magisterio desde la adolescencia.
En 1916 se destacó por la oposición que hizo a la ocupación militar por parte de Estados Unidos. Había participado en movilizaciones para expresar su repudio.
Cuando en 1932, sicarios de la dictadura de Trujillo asesinaron en San José de las Matas a los hermanos César, Faustino y el maestro Andrés Perozo, Ercilia Pepín, dirigía el liceo México de Santiago, y en señal de repudió hizo izar a media asta la bandera nacional.
En el magisterio nacional Ercilia Pepín es un símbolo de la maestra consagrada.
Dedicó su vida a mejorar las condiciones y la calidad de la educación dominicana. Introdujo el desayuno escolar, laboratorio y uniformes en la primera escuela donde enseñó, siendo directora a los 14 años.
También dedicó tiempo a la docencia privada, formando jóvenes bachilleres en Ciencias y Letras.
Ercilia Pepín, fue una luchadora por la igualdad de género y mantuvo una posición de rechazo a la ocupación estadounidense de 1916-1924. Mantuvo una posición contra la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo Molina. Por ello, fue cancelada como directora del colegio de señoritas.
La maestra nació en Santiago, el 7 de diciembre de 1886, hija de José Pepín y Edelmira Estrella. Falleció el 14 de junio de 1939.
Su muerte unió al pueblo de Santiago que la acompañó hasta su última morada.