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América Latina signada por la desigualdad entre ricos y pobres

La Habana, 5 feb (Prensa Latina) Una de las expresiones más importantes de la desigualdad son las diferencias existentes hoy en el impacto de la pandemia de la Covid-19 entre los multimillonarios y el resto de la población de América Latina.

  • febrero 5, 2022
  • CST09:39 (GMT) -0500

Según datos recopilados por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), mientras la pobreza extrema en la región afectó a unos cinco millones más de personas en 2021 -86 millones de individuos-, el patrimonio de los 104 milmillonarios de la región ascendió a unos 446 mil 600 millones de dólares.

Cifra que representa aproximadamente el 11 por ciento del Producto Interno Bruto proyectado por la Cepal para los siete países donde vivían los mencionados milmillonarios en 2021 con mayor representación en Chile, Brasil y México.

Uno de los problemas para el exponencial incremento de las desigualdades en Latinoamérica son las cargas tributarias de los ricos acordes a su nivel de riqueza y los impuestos directos a la propiedad (bienes inmuebles, herencias, transacciones financieras) poco importantes tradicionalmente, resalta la Cepal.

Pero aunque la medición de la extrema riqueza aporta a la caracterización de la desigualdad, refiere el organismo, la valoración del patrimonio de los más ricos tiene limitaciones y la Cepal para sus cálculos utiliza las estimaciones de Forbes.

Aun así, no se puede olvidar la medición de la riqueza aporta elemento más allá del efecto coyuntural de la pandemia, pues también permite un acercamiento a los factores estructurales que inciden en la reproducción de la desigualdad en el tiempo.

A KILÓMETROS DE DISTANCIA

En el lado opuesto, y como muestra de las crecientes brechas entre ricos y pobres se encuentran las personas en situación de pobreza extrema que entre 2020 y 2021 avanzaron aceleradamente como consecuencia de la profundización de la crisis social y sanitaria derivada al Covid-19, según estima la Cepal en su informe anual Panorama Social de América Latina.

En 2020, el 33 por ciento de la población latinoamericana se encontraba en situación de pobreza y un 13,1 porciento vivía en condiciones de pobreza extrema, ello en números significa que unos 204 millones de individuos no tuvieron ingresos suficientes para cubrir sus necesidades básicas.

De ellos, 81 millones de personas carecieron de los recursos incluso para adquirir una canasta básica de alimentos, se trata de un notorio retroceso para la región.

A nivel regional, estas alzas muestran la consolidación de una tendencia al aumento de las personas en situación de pobreza que empezó a manifestarse a partir de 2015, sobre todo en el caso de la pobreza extrema, explica la Cepal.

En un contexto de recuperación económica, amplía, en 2021 cabe esperar que tanto la pobreza extrema como la pobreza disminuyan y se recupere parte del retroceso

observado en 2020, pero se sitúe apenas un 1,0 por ciento por debajo, en un 32,1. Dato superior frente a los niveles observados antes de la pandemia, 24 por ciento.

A su vez, la pobreza extrema se situaría en 13,8, como consecuencia de una reducción de las transferencias de ingresos de emergencia en algunos países, que no alcanzaría a ser compensada por el incremento esperado de los ingresos por empleo, remarca el organismo internacional.

En resumen, con una crisis sanitaria persistente en América Latina y el Caribe se extenderán a su vez a la dimension social y sanitaria con afectaciones en la pobreza y la pobreza extrema, la desigualdad, la desocupación y la falta de acceso a la educación y a cuidados, que aún no muestran señales de recuperación.

Además, pese las señales de recuperación económica en 2021, se evidencia que no está centrada ni en la igualdad ni en la sostenibilidad ambiental, y se manifieta en un contexto de permanencia de los retrocesos en el desarrollo social, opina la Cepal.

oda/kmg/tdd

Acuerdos fiscales son un reto para América Latina según Cepal

Santiago de Chile, 19 ene (Prensa Latina) A pesar de importantes cambios políticos que vive Latinoamérica, alcanzar acuerdos fiscales será un reto para las administraciones, advirtieron hoy directivos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).Share on facebook Share on twitter Share on whatsapp Share on telegram Share on email

  • enero 19, 2022
  • CST15:14 (GMT) -0500

La secretaria ejecutiva del organismo, Alicia Bárcena, señaló que el área inició 2022 más endeudada, pobre y enojada, pero las transformaciones actuales pueden ser oportunidades para reducir la evasión fiscal, eliminar paraísos fiscales y flujos financieros ilícitos, problemas acuciantes de su economía.

Al intervenir en el coloquio La revolución fiscal de Biden. ¿Qué consecuencias tendrá para Europa y América Latina?, organizado por las españolas Fundación Alternativas y Casa de América, Bárcena significó la importancia de la actuación conjunta.

“No estamos actuando con una sola voz. Ante los temas globales, la región debe tener una posición mucho más clara y unificada”, insistió la secretaria ejecutiva según la cuenta de Twitter de la comisión.

En sus palabras la directiva abordó las asimetrías entre países desarrollados y en desarrollo, las cuales se profundizaron durante la pandemia de Covid-19, y alertó que los estímulos fiscales aplicados en América Latina y el Caribe son más bien para aliviar la crisis y no tanto para la reconstrucción.

Al respecto comentó que la zona no ha entrado en la fase de recuperación y de planificación estratégica, lo cual calificó de muy preocupante.

Bárcena apuntó a la evasión fiscal de las multinacionales como uno de los principales problemas de Latinoamérica, que tiene pérdidas anuales de 40 mil millones de dólares por esta causa.

Asimismo, subrayó lo perjudicial de las asimetrías y de la cultura del privilegio, que a nivel internacional favorece a quienes más recursos tienen, pues “los ganadores de siempre reciben los beneficios”.

Precisó que la propuesta de redistribución tributaria solo se aplica a las empresas grandes con facturación superior a los 22 mil millones de dólares, de modo que existen muchas tareas pendientes y una de ellas es vencer dicha cultura del privilegio que fomenta la evasión.

Este fenómeno alcanza actualmente el 6,1 por ciento del producto interno bruto, de acuerdo con la Cepal, por lo que se requiere de una nueva generación de políticas tributarias que mejoren el nivel de recaudación y su composición.

América Latina y el Caribe es la región con menor nivel de inversión en el mundo, con un 19 por ciento, cuando el resto está en el entorno del 26, resaltó Bárcena.

acl/kmg