SANTO DOMINGO, el 27 de enero de 1801, Toussaint Louverture, emitió una proclama en virtud de la cual invitó a los habitantes de la ciudad Santo Domingo, a retornar a sus actividades habituales. En nombre de Francia ocupó el Santo Domingo Español.
Exhortó a los que habían abandonado la isla por la ocupación de las tropas de Toussaint a retornar a Santo Domingo. Dirigió el mensaje “a personas de todos los colores”.
De esa manera, el jefe militar que representaba a Francia, trataba de disipar los temores que inquietaban a los habitantes de Santo Domingo.
Tras la entrada en vigencia del Tratado de Basilea, familias de origen español se trasladaron a Cuba y a Puerto Rico.
Los que se fueron a Cuba sufrieron múltiples dificultades porque no recibieron la tierra y facilidades que prometieron las autoridades coloniales a los que salieran de Santo Domingo.
Por ello, muchos solicitaron por escrito al Rey de España, que se les concediera un tiempo mayor de un año para dejar el Santo Domingo español, pero tan pronto se materializó la ocupación de Toussaint comenzaron a salir.
El día 25 de enero de 1801, tropas del Ejército de Toussaint Louverture habían vencido a las fuerzas españolas, que comandaba el gobernador Joaquín García y Moreno, en la zona del río Nizao.
Toussaint había comunicado su decisión de ocupar el Santo Domingo español a su Gobernador Joaquín García y Moreno, con el pretexto de ejecutar el Tratado de Basilea, suscrito el 22 de julio de 1795 por España y Francia, en Basilea, Suiza, para poner fin a la guerra que sostenían.
Una versión da cuenta de que a Toussaint le resultó fácil imponerse a los españoles, porque el gobernador conservaba 600 hombres mal armados.
Historiadores dominicanos que han estudiado el tema coinciden en que en los alrededores del río Nizao, las tropas de Toussaint destrozaron en combate la débil resistencia que quiso oponérseles.
Luego de las hostilidades Toussaint negoció con el gobernador Joaquín García y Monero la capitulación. El día siguiente, el 26 de enero de 1801, las tropas vencedoras marcharon a la ciudad de Santo Domingo, la cual tomaron sin resistencia de los vecinos.
En virtud del Tratado de Basilea, Francia le devolvió a España las áreas que había tomado durante la guerra en la Península Ibérica, y España le dio a cambio su colonia situada en la parte oriental de isla de Santo Domingo, donde el 27 de febrero de 1844, fue fundada la República Dominicana.
La información sobre la firma del Tratado de Basilea se conoció en Santo Domingo el 18 de octubre de 1795, en el momento que los españoles luchaban contra las fuerzas francesas que representaba Toussaint Luverture, quien trataba de tomar el Santo Domingo español.
El acuerdo se conoce como Tratado de Basilea, porque fue firmado el 22 de julio de 1795, en la ciudad Suiza de Basilea.
Cuando se conoció la noticia en Santo Domingo, los españoles habían logrado sacar a los franceses de Bánica y Las Caobas, al aprovechar una derrota que sufrió Toussaint Luoverture, frente a tropas inglesas en el Santo Domingo francés, hoy la República de Haití.
Toussaint, tomó el Santo Domingo Español en nombre de Francia, en el año 1801, ya que el Tratado de Basilea no se pudo ejecutar antes debido a dificultades para aplicarlo.
El Tratado de Basilea establecía que a cambio de la restitución de los territorios conquistados por los franceses en el Norte de la Península Ibérica, “el Rey de España, por sí y sus sucesores, cede y abandona en toda propiedad a la República Francesa toda la parte española de la isla de Santo Domingo en las Antillas”. (sic)
En virtud del Tratado de Basilea, un mes después de conocerse en la isla de Santo Domingo la ratificación del acuerdo, “las tropas españolas estarán prontas a evacuar las plazas, puertos y establecimientos que aquí ocupan, para entregarlos a las tropas francesas cuando se presenten a tomar posesión de ellas”.
Dispone que las plazas, puertos y establecimientos fueran entregados a los franceses con los cañones, municiones de guerra y efectos necesarios para su defensa, de que dispusieran en la época en que se tuvo noticia de las negociaciones.
Cuando Toussaint comunicó el 6 de enero de 1801 su decisión de ocupar Santo Domingo, el Gobernador Joaquín García Moreno planteó que no era posible porque aún estaban pendientes decisiones de Napoleón y el Gobierno de España, pero ese argumento no surtió ningún efecto.
El Tratado establecía que “los habitantes de la parte española de Santo Domingo, que por sus intereses u otros motivos prefieran transferirse con sus bienes a las posesiones de Su Majestad Católica, podrán hacerlo en el espacio de un año contado desde la fecha de este Tratado”.