Mi Voz

El autoritarismo sigue vivo

Diariodominicano.com

Eli Heiliger

Máximo Romero Marcial fue encarcelado por vocear corrupto al presidente de la Cámara de Diputados.

Donald Trump, el presidente de la nación más poderosa económica y militarmente del mundo, acudió anoche al National Park a ver el quinto juego de la Serie Mundial y se encontró en el estadio con el abucheo de ciudadanos.

Al presidente estadounidense ni a ninguno de los miembros de su escolta se le antojó maltratar u ordenar encarcelar a los ciudadanos que los abuchearon, al contrario, las autoridades los protegieron.

El joven Máximo Romero Marcial, cuya integridad física debe ser preservada, un ciudadano de la República fue apresado y conducido al destacamento policial de La 40, donde pernoctó, simplemente por vocear «¡corrupto!» a Radhamés Camacho, presidente de la Cámara de Diputados y alto dirigente del Partido de la Liberación Dominicana.

El legislador compró una botella de Whisky por valor de RD$ 8000 y el joven Roberto Marcial le dijo: «Compraste eso con dinero del pueblo», lo que provocó la irritación del legislador.

Me llama la atención el contraste entre lo ocurrido en el estadio de Washington y el Estadio Quisqueya. En Estados Unidos es normal que un ciudadano exprese su discordancia con la política oficial y por ello es protegido por las autoridades para que exprese ese derecho.

Aquí ocurre todo lo contrario, un ciudadano ventila al aire su discordancia o le corea corrupto a algún funcionario y recibe por respuesta una orden de arresto o el maltrato policial.

Simplemente creía que el autoritarismo y la «guapeza barata», amparada por un buen equipo de seguridad, claro pagada con los recursos del fisco, habían hecho mutis, pero siguen muy campantes. Es duro decirlo, pero a la distancia de 58 años de la desaparición de Rafael Leónidas Trujillo, todavía tenemos «trujillitos» entre nosotros.

2019-10-28 21:03:11