LA HABANA, el 1 de diciembre de 1950, agentes al servicio del dictador Rafael Leónidas Trujillo desaparecieron en la Habana, Cuba al exiliado dominicano Mauricio Báez.
Mauricio Báez había sido un líder de los trabajadores cañeros de la región oriental de la República Dominicana, donde estaban los principales ingenios azucareros del país.
En el año 1941 organizó la primera huelga de trabajadores azucareros que se produjo en la dictadura de Trujillo. Por sus actividades estuvo en prisión.
Mauricio Báez también fue el fundador del Partido Socialista Popular.
Luego salió al exilio y en Cuba fue sometido a vigilancia por agentes de Trujillo.
Los diplomáticos al servicio de la dictadura tenían la misión de enviar mensajes al régimen sobre las actividades de Mauricio Báez y otros exiliados.
Su desaparición en la Habana, el 1 de diciembre de 1950, quedó en la impunidad.