Congelamiento de precios en Argentina no impactaría en reducción inflacionaria, dice experto

diariodominicano.com

   BUENOS AIRES, 23 oct (Xinhua) -- Las políticas de precios establecidas por el gobierno de Argentina podrían contener el alza de los valores de los bienes de primera necesidad durante el último trimestre del año, pero tendrían poco impacto en la meta de reducción de la inflación, aseguró hoy el economista argentino y profesor universitario, Pablo Salvador.
   El profesor de Economía en la Universidad Nacional de Cuyo dialogó con Xinhua acerca de la reciente medida gubernamental de congelar por 90 días los valores de más de 1.400 productos, todo ello en un contexto de mayor escalada inflacionaria y de encarecimiento de la canasta básica argentina.
   "Hoy estamos teniendo controles de precios, un tipo de cambio congelado que crece a razón de 1 por ciento por mes, tarifas congeladas pero igualmente estamos teniendo una inflación interanual del 50 por ciento", señaló Salvador.
   "Con lo cual este congelamiento puede llegar a morigerar un poco la evolución de los precios en el último trimestre del año pero dudo que tenga una incidencia real en la inflación, más bien la posterga", enfatizó.
   La medida aplicada vía resolución administrativa, sin previo acuerdo con el sector privado, establece el congelamiento de precios de un total de 1.432 productos de almacén, higiene y cuidado personal hasta el próximo 7 de octubre.
   El economista explicó que la inflación núcleo en el país, que no considera factores estacionales ni otras variables externas, se encuentra hoy por encima del 50 por ciento en su medición interanual, reflejando un aumento mensual de entre el 3 y el 5 por ciento.
   En esa línea, no descartó que los mayores controles puedan llevar a que esos precios "contenidos" se manifiesten de manera más abrupta durante el año 2022.
   Explicó que uno de los problemas de la escalada inflacionaria en Argentina "es la excesiva oferta de dinero y la poca demanda", un problema derivado de la emisión monetaria que, aunque ya existía en el país, se incrementó durante la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19).
   "Hay más dinero circulando dentro de la economía, hay menos empresas demandando pesos, con lo cual cae el precio de dinero y aumentan los precios de todos los demás bienes y servicios", sostuvo.
   El doctor en Economía por la Universidad de Jyvaskyla de Finlandia alertó que de no repararse esta emisión monetaria, la inflación podría ser mayor y por ende aumentarían los niveles de pobreza en el país.
   "Si los salarios no acompañan esta alza de la inflación y las canastas, tanto básica como de alimentos, van subiendo muy por encima de los ingresos de las familias, podríamos ir progresivamente viendo a más hogares que desciendan la línea de la pobreza", remarcó el economista.
   El analista consideró además que, pese a la tendencia bajista intermensual de la inflación observada en Argentina entre los meses de marzo y septiembre, "la inflación interanual siempre ha ido en ascenso".
   "No ha habido una desaceleración real del alza de precios, y esto es producto de que también se están viendo las consecuencias de la emisión monetaria que hubo durante la cuarentena", agregó.
   Para Salvador, Argentina volverá a cerrar con una inflación anual cercana al 50 por ciento, en línea con la mayoría de los pronósticos de entidades y consultoras financieras privadas y muy por encima de las metas oficiales que se anunciaron a principios de año.